La consellera de Bienestar Social, Asunción Sánchez Zaplana, se sumó ayer a las voces que reclaman evitar el ingreso en prisión de María del Carmen García, la vecina de Benejúzar condenada a cinco años y medio de cárcel por quemar al violador de su hija y a quien el Gobierno ha denegado el indulto pese a contar con los informes favorables tanto del fiscal como del tribunal sentenciador. Tras dejar claro el respeto a los tribunales y al Estado de Derecho y manifestarse en contra de que alguien se pueda tomar la Justicia por su mano o quitar la vida a otra persona, la consellera precisó que "desde un punto de vista humano tendría que darse el indulto a esta mujer".

Sánchez Zaplana admitió que se trata de "un caso muy particular" y agregó que "sabemos que tomó una decisión equivocada (en alusión a la agresión al hombre que violó a su hija Verónica) pero como personas, como mujeres, podemos entender que lo hizo motivada por el profundo dolor de una madre".

La responsable de Bienestar Social en la Comunidad no quiso dejar de recordar a la familia de la víctima para precisar que entendía "el dolor de esa familia, el dolor de las dos familias".

En otro momento de las declaraciones a este diario, la consellera manifestó su convencimiento de que el Gobierno volvería a estudiar una nueva petición de indulto para María del Carmen si esta se hace llegar al tiempo que señaló, a preguntas de este diario, que tal vez habría que regular de otra forma la figura del indulto, una medida de gracia facultativa del Gobierno que no requiere argumentación alguna tanto para la concesión como para su rechazo. Sánchez Zaplana prefirió no pronunciarse sobre el concedido al conductor kamikaze condenado a trece años de cárcel tras matar a un joven y dejar a su novia gravemente herida, una decisión polémica tras conocerse que el abogado que le defendió trabajaba en el mismo despacho que el hijo del ministro.