Un programa de televisión fue la pista que llevó a la Policía a la captura de El Franky en el chalé en el que se escondía en Pedreguer, según declaró ayer uno de los responsables de la Unidad de Localización de Fugitivos que llevó a cabo la investigación en el juicio que se sigue en la Audiencia de Alicante contra Francisco Javier Martínez San Millán por blanqueo de capitales. Este narco huyó de la Justicia en el año 1994 por la Operación Nécora y fue localizado en septiembre de 2006 en un chalé de lujo de Pedreguer. El grupo policial se creó en el año 2004 y su primera prioridad fue localizar a los fugitivos más antiguos. La difusión en un programa de TVE de las fotografías de estos prófugos llevó a los agentes a la pista de que El Franky podría estar ocultándose en una zona cercana a Dénia. La sesión de ayer se centró en las declaraciones de los policías que intervinieron en el caso.

Los agentes negaron que se hubiera utilizado ningún dispositivo mecánico para localizar al prófugo. Ni escuchas telefónicas, ni sistemas de GPS en los coches de los familiares de éste. "Fue un trabajo de zapatillas y muchas vigilancias en los accesos a la finca", aseguró un mando policial. Según manifestó, el acusado se desplazaba constantemente. La detención se produjo en septiembre de 2006 el momento en que el fugitivo salía en un coche de la finca con su exmujer, sus dos hijos y sus padres para irse a comer juntos. A todos ellos les había mandado a buscar para organizar el encuentro en Alicante. En este punto, el abogado de la mujer de El Franky cuestionó el modo en que se practicaron los arrestos, alegando que a ella se la obligó a declarar en Comisaría como testigo, sin que estuviera detenida y sin que se le informara que tenía derecho a no testificar contra su esposo.

Por su parte, los peritos en huellas de la Policía Científica descartaron ayer que las huellas dactilares de El Franky hubieran sido alteradas por un accidente laboral en una prensa hidráulica, tal y como declaró el acusado en el primer día del juicio. Al ir a tomarle las huellas, los agentes se encontraron con que éstas no coincidían. Según su declaración, el acusado se había intercambiado el dibujo dactilar de las huellas dactilares del pulgar y el índice de su mano derecha con las de los pulgares de sus pies . Una cicatriz alrededor de los dedos acreditaba la intervención. Los dibujos intercambiados coincidían además perfectamente con las que tenían en las fichas policiales.

El domicilio que aparecía como la sede de la mercantil a cuyo nombre estaba el chalé de Pedreguer era un piso cerrado en una zona céntrico de Salou, sin ningún tipo de rótulos, declaró otro de los agentes. La Policía valora el inmueble en el que el narco residió en la provincia en algo más de tres millones de euros. Según la investigación, El Franky compró la finca con la construcción casi en ruinas y la remodeló totalmente hasta el punto de vivir rodeado de lujos, como sauna, piscina, jacuzzi o gimnasio. En el momento de la operación, se iba a acometer una ampliación en la vivienda. El Franky llegó a ordenar demoler la fachada porque no le gustaba el color de la piedra, según los testimonios que los agentes tuvieron de vecinos.

Tasaciones de terrenos por Google al no autorizar Justicia el desplazamiento

El perito judicial que hizo las tasaciones de los seis inmuebles adquiridos en Pontevedra tuvo el Google Earth entre sus fuentes de información al no haber podido desplazarse a esta provincia para visitar los bienes por no haberlo autorizado la Dirección General de Justicia de la Generalitat Valenciana. El abogado defensor de la exmujer de El Franky sostiene que las tasaciones efectuadas por los informes policiales, que estiman un precio de 1,8 millones, están sobrevaloradas y que ésta compró los bienes con su propio dinero. Los policías que investigaron los bienes del grupo señalaron que las fincas de Pontevedra se compraron a un precio muy bajo y después multiplicaron notablemente su valor, lo que apuntaba a la existencia de grandes inversiones. Los funcionarios incidieron en el hecho de que en el premio de lotería que financió estas compras las papeletas compradas no tenían una numeración correlativa. En el chalé de Pedreguer, los agentes hallaron numerosa documentación y agendas en las que Franky llevaba una pormenorizada contabilidad, "que llegaba a la exageración" y en la que aparecía al detalle datos sobre los bienes, e instrucciones sobre cómo crear la sociedad a cuyo nombre estaba el chalé. Dicha mercantil, llamada Loc Sea SL, estaba cerrada desde el año 2000 y sin trabajadores y aparece como la que hizo reformas en dicho chalé. El fiscal acusa a Martínez San Millán de haber blanqueado el dinero del narcotráfico para adquirir diferentes bienes inmuebles, que ponía a nombre otras personas para que no se le vinculara con dichas adquisiciones. J. A. M.