Una mujer murió en la noche del sábado de un paro cardíaco en dependencias policiales de Granada, donde permanecía como supuesta autora de una puñalada a su sobrino. Según los vecinos, la reyerta se debió a disputas previas por un perro.

La Jefatura Superior de Policía de Andalucía Oriental informó en un comunicado de que la mujer murió cerca de las diez de la noche en dependencias policiales mientras se encontraba ingresada en custodia.

La mujer había sido detenida como supuesta autora de las puñaladas que sufrió un hombre de 34 años en el abdomen.

Según señaló la delegación de Salud de la Junta de Andalucía, el herido recibió atención médica y la sutura de las heridas en el abdomen y recibió poco después el alta hospitalaria, aunque inicialmente se informó que presentaba lesiones de gravedad.

Los vecinos del lugar de la reyerta, que tuvo lugar sobre las tres de la tarde de ayer en el bloque número 7 de la calle Pintor Gabriel Morcillo, en el barrio granadino de Almanjayar, apuntaron que la mujer era tía del herido y que el enfrentamiento que acabó con un arma blanca estuvo motivado por un perro, sin que los agentes encargados del caso hayan corroborado estos términos, cuando una llamada al 091 alertó de una reyerta entre dos familias en un bloque de la zona Norte de la capital.

La Policía Nacional detalló que los agentes que acudieron al lugar de los hechos tras la reyerta encontraron al herido con diferentes lesiones de arma blanca y a la mujer con heridas de carácter leve en manos y cuerpo.

Los dos implicados fueron trasladados a un centro hospitalario, hasta que a las ocho de la tarde los servicios médicos le dieron el alta a la mujer, que fue trasladada a dependencias policiales.

Al poco de ingresar en el centro, los agentes percibieron que la mujer no se encontraba bien y avisaron a los servicios de emergencia para que la atendieran, que trabajaron con ella durante más de una hora por una parada cardiovascular sin lograr evitar su muerte.

La fallecida, según detalló la Policía Nacional, tenía un tratamiento por los trastornos cardiovasculares que padecía. Los agentes avisaron a la Autoridad Judicial después de que los servicios médicos certificaron su muerte y el cuerpo de la fallecida permanecía ayer en el Anatómico Forense para certificar las causas del suceso.