Una niña de apenas dos años falleció el martes atragantada, según los primeros indicios, en una guardería privada de Málaga capital, conveniada con la Junta de Andalucía, según informaron fuentes de la Administración autonómica. La propia directora del centro de educación infantil Los Picapiedra de Nueva Málaga, que acoge a niños de hasta tres años, trasladó a la menor a un centro de salud cercano. Pese a los intentos para reanimarla, no pudieron hacer nada por salvar su vida. La delegación Provincial de Educación de la Junta de Andalucía ha ordenado a la Inspección Educativa la apertura de un expediente de investigación para aclarar lo sucedido.
La citada delegación mostró ayer su "profunda consternación" por lo sucedido y expresó su más sentido pésame a la familia de la pequeña y a toda la comunidad educativa del centro. El delegado del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, trasladó un mensaje de tranquilidad a todos los padres y familiares. "Se ha avanzado mucho en la homologación de los centros, en las autorizaciones y en las inspecciones de los mismos", resaltó.
