Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Ellos sí que no van

Uno de cada cuatro hombres que desea ser padre puede requerir un tratamiento de fertilidad por la disminución de la calidad del semen

Ellos sí que no van

La infertilidad masculina ya representa entre un 40 y un 45% de los problemas de fertilidad en la pareja. La disminución de la calidad espermática se relaciona con un estilo de vida no saludable: el estrés, el consumo de drogas, el tabaco, el consumo excesivo de alcohol y dietas no saludables parecen ser los principales factores modificables responsables. Este hecho, unido a la aparente disminución de la calidad del semen en los últimos años -con menor cantidad de espermatozoides-, hace saltar las alertas respecto a la evolución de la fertilidad.

Una investigación liderada por la doctora Ashley Tiegs concluyó tras examinar el recuento total de espermatozoides móviles (TMSC) -parámetro más importante que predice la probabilidad de lograr un embarazo- de casi 120.000 hombres de España y EE UU entre los años 2002 y 2017, que el riesgo de requerir un tratamiento de fertilidad ha aumentado, pasando de un 12,4% en 2004 a un 21,3% en 2017. Esto supone un crecimiento del 9% en poco más de una década. El estudio recibió el Premio Académico de la Sociedad para la Reproducción Masculina y Urología, entregado en la última edición de la ASRM (Sociedad Americana de Medicina Reproductiva).

La edad de los varones a la hora de afrontar la paternidad -que se suma también a la mayor madurez de las mujeres- es otro de los factores que propicia esa estadística, según confirma el ginecólogo Domingo Vázquez. Según sus datos, la calidad seminal se ha visto mermada. Sin embargo, no aprecia un crecimiento alarmante de los casos de infertilidad masculina.

"Estos datos implican unas connotaciones clínicas que tienen un efecto evidente en la fertilidad masculina, lo cual obliga a hacer uso de tratamientos más complejos para cumplir el deseo reproductivo de nuestros pacientes en comparación con hace una o dos décadas", explica por su parte el director de la Fundación IVI y coautor del estudio en España, Nicolás Garrido.

En los casos de menor calidad espermática, con TMSC entre cero y cinco millones, podrían precisar de una fecundación in vitro (FIV), posiblemente con inyección intracitoplásmica de esperma (ICSI), para lograr un embarazo. Actualmente se disponen de técnicas como el MACS, que permite seleccionar los espermatozoides con las mejores características para ser utilizados en los tratamientos de reproducción asistida.

"Abre una gran incógnita a investigar, acerca de las causas que pudieran estar causándolo, y ratifica con datos objetivos y robustos una evidencia que llevamos tiempo observando en consulta", añade el director Nicolás Garrido en referencia a la necesidad de profundizar en las causas.

"Tras estos resultados, se hace necesario analizar con más detalle las causas de este hecho y las medidas a tomar", añade. "Existen muchas investigaciones acerca de los efectos adversos del estilo de vida tóxico y la exposición constante a influencias ambientales negativas sobre la calidad de los espermatozoides, pero aún no se sabe con exactitud cómo de nocivos resultan estos factores".

A pesar de la falta de evidencia científica suficiente, algunas clínicas de reproducción asistida proporcionan recomendaciones dietéticas y suplementos antes de iniciar tratamientos de fecundación in-vitro (FIV) o la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI).

Como explica también la directora médica de otra clínica de fertilidad, Fulvia Mancini, varios estudios asocian el consumo de productos grasos a la mala calidad del esperma. Es decir, que "el exceso de tejido adiposo asociado a dietas hipercalóricas está relacionado con la disminución de la cantidad de espermatozoides y de su movilidad y morfología". Los bebés nacidos de padres obesos también podrían heredar enfermedades como la diabetes tipo 2 e incluso algún tipo de cáncer.

Recientemente, investigadores del Ciberborn y la Unidad de Nutrición Humana de la Universitat Rovira i Virgili (URV) y del Institut d'Investigació Sanitària Pere i Virgili (IISPV), en colaboración con un departamento de la Universidad de Guadalajara (México), realizaron la revisión sistemática de todos los estudios clínicos de la literatura científica que relacionan los diferentes nutrientes y suplementos dietéticos con la calidad espermática y la fertilidad masculina.

Concluyeron que la suplementación de la dieta -a través de pastillas o líquidos- con ácidos grasos omega-3 y coenzima-Q10 podría tener un efecto beneficioso en la cantidad de espermatozoides del semen. La suplementación a base de selenio, zinc, ácidos grasos omega-3 y coenzima-Q10 se asocia a un aumento en la concentración espermática y con carnitinas se relaciona con una mejoría de la movilidad.

Consejos para mejorar la calidad del semen

El índice de natalidad está cayendo de manera drástica en la mayoría de los países industrializados. Los expertos afirman que parte de este descenso de la natalidad está relacionado con un empeoramiento de la calidad seminal, unido a un progresivo descenso en la concentración espermática en varones sanos de países industrializados.

Según explica el doctor José Ángel Delgado, andrólogo de la clínica Ginefiv, una buena salud reproductiva, en realidad, requiere de la integridad y normal funcionamiento de todos los sistemas orgánicos y no sólo estrictamente del sistema reproductor. Así, es fundamental que tanto el sistema cardiovascular, nervioso, endocrino, digestivo, urológico, etc, estén en perfecto estado.

Para mejorar la calidad del semen, o reducir el riesgo de tener mala calidad seminal, es necesario conocerse los factores que afectan en su producción. El doctor Delgado explica los factores que repercuten en el empeoramiento de la fertilidad que deben ser evitados:

  1. Algunas enfermedades están asociadas a la función reproductiva masculina. Enfermedades de alta prevalencia como son la obesidad, hipertensión, diabetes mellitus, alteraciones cardiovasculares, hipogondismo (disminución de los niveles fisilógicos de testosterona) o síndrome metabólico (asociación de hipertensión arterial, hiperglucemia, hipercolesterolemia y obesidad abdominal), se asocian con menor fertilidad.
  2. Hay que mantener unos buenos hábitos de vida, evitando el sedentarismo, el estrés crónico, el consumo de sustancias tóxicas y las dietas inadecuadas tienen una repercusión directa en la fertilidad.
  3. Hay que tener cuidado con el consumo de algunos fármacos, cuyo consumo se está incrementando paulatinamente y que puede afectar a la fertilidad. Así, medicamentos que tienen efectos hormonales como los anabolizantes o la testosterona, utilizados en personas jóvenes con fines deportivos, pueden producir oligozoospermias severas e incluso azoospermia; los antihipertensivos, y los psicofármacos pueden afectar a la calidad seminal, a la función sexual y a los parámetros hormonales.
  4. Una adecuada fertilidad requiere de una buena alimentación. El experto recomienda un correcto aporte de elementos nutricionales, variado, aportando glúcidos, lípidos, proteinas, oligoelementos y vitaminas en composición adecuada. Esto se consigue con una comida variada (frutas, hortalizas, carne, pescados, huevos, productos lácteos, frutos secos, etc.) en cantidades prudentes, regularmente repartidas en el día, con un aporte calórico adecuado a la edad y a la actividad física.
  5. Mantener un peso adecuado. Recuerdan que el sobrepeso y sobre todo la obesidad tienen una correlación directa con la fertilidad y la calidad seminal.
  6. Hay que evitar el consumo de tóxicos, tabaco, alcohol y otras drogas, así como el consumo inadecuado de medicamentos (si los tomas que sea siempre bajo prescripción médica y en la posología indicada).
  7. En el caso de estar expuesto fuentes de calor, de radiación, contaminantes, venenos u otros tóxicos en tu profesión, ten en cuenta que estos pueden afectar a la calidad seminal, y toma todas las medidas de seguridad necesarias.

¿Quieres saber más sobre este tema?

  • A más porros, peor semen
  • ¿Perjudican los móviles la fertilidad masculina?
  • ¿Pueden las nueces mejorar la calidad seminal?

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats