Un joven de 22 años de edad, R. C. G., fue hallado ayer ahorcado horas después de que hubiera herido en una mano a su expareja al atacarla con un cuchillo de grandes dimensiones, tras romper una ventana y entrar en su casa durante la Nochebuena. El fallecido, vecino de Posada de Llanes (Asturias), también agredió a la madre de su expareja: le propinó dos puñetazos e intentó atropellarla al huir en su coche, según indicaron fuentes cercanas a la investigación. Tras ser alertada por los vecinos, la Guardia Civil inició de inmediato la búsqueda de R. C. G. por un supuesto delito de violencia machista.

Todo comenzó minutos después de las once de la noche del lunes, cuando el joven llanisco entró violentamente en la casa de la madre de su expareja, situada a escasos metros de la suya, en la localidad de Posada de Llanes. Blandiendo un cuchillo y profiriendo amenazas de muerte, R. C. G. persiguió por la vivienda a su expareja, de 18 años, con la que tenía una hija de ocho meses. Una hermana de la joven, de corta edad, al percatarse del ataque cogió a la bebé en brazos y huyo de la casa.

Los gritos de los ocupantes de la vivienda alertaron a los vecinos, que se acercaron a ver lo que ocurría. El atacante, tras herir a su expareja en una mano, salió huyendo. Ya en la calle, aún tuvo tiempo para propinar dos puñetazos en la cara a la madre de su excompañera, a la que rompió un diente. Después, según las fuentes consultadas, se subió en un automóvil y estuvo a punto de atropellar a la madre de la que fue su pareja. Nada más se supo del paradero de R. C. G. hasta la mañana siguiente.

La joven agredida acudió en la mañana de ayer al cuartel de la Guardia Civil de Llanes a interponer una denuncia por un presunto intento de homicidio. Fue precisamente en ese momento cuando unos cazadores alertaron a los agentes: en el paraje conocido como La Llera, en las inmediaciones de Posada de Llanes y Bricia, acababan de hallar el cuerpo sin vida de un joven, colgado de un árbol. La Guardia Civil comprobó poco después que se trataba del agresor.

El levantamiento del cadáver se produjo cuando faltaban unos minutos para la una y media de la tarde de ayer. El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Oviedo, donde hoy se realizará la autopsia. Según diversas fuentes, R. C. G. habría anunciado su intención de quitarse la vida poco antes de hacerlo, mediante un mensaje de texto que envió a su expareja a través de una red social. Las desavenencias entre R. C. G. y su expareja venían de lejos, según las fuentes consultadas. El fallecido tenía pendiente un juicio el próximo mes de enero por haber quebrantado presuntamente hace meses una orden de alejamiento.

Según fuentes cercanas a las pesquisas policiales, la mayor preocupación de las fuerzas del orden y de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Llanes era ayer garantizar la seguridad de la joven agredida y de su familia: su hija, su madre y sus tres hermanos, menores de edad, porque las dos familias implicadas en el suceso viven a escasos metros de distancia.