Una alumna se pilla el pelo con la pala de la silla y grita... "¡Buff, cómo me ponen esos grititos!" dice el profesor; una alumna estornuda... el profesor: "Si ya te dije yo que ayer ibas muy fresca"; una alumna dice "¿En esta pregunta me enrollo?", el profesor responde: "No hace falta, pero si quieres enrollarte conmigo es otro tema"; una alumna afirma que es muy nerviosa... el profesor replica "ya me di cuenta anoche". Estas frases, supuestamente vertidas por un profesor de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación de la Universidad de Valencia (UV) a sus alumnas de primero de Educación Social el pasado curso, empapelan desde la noche del martes la entrada de este centro para denunciar públicamente a dicho docente por "acosar verbalmente de forma continuada a varias alumnas de distintas promociones".

Las alumnas promotoras de la colgada de carteles, que se quedaron a dormir en la facultad en señal de protesta, acusan al rectorado de no haber actuado contra el profesor. "La respuesta de la Universitat ha sido avisarle de la situación y quitar las horas de docencia de este profesor", sostienen.

Sin embargo, fuentes del rectorado, aseguran que anoche a las 20:00 horas ninguna estudiante testigo de estos hechos los ha denunciado ante la Unidad de Igualdad de la UV, con lo que no se puede activar el Protocolo anti Acoso de la Universidad y abrir el consiguiente expediente informativo que pueda derivar, en caso de que se demuestran las acusaciones, en un expediente sancionador contra el docente.

Miedo a posibles represalias

Las alumnas, que tienen miedo a posibles represalias académicas y legales, no han revelado el nombre del profesor al que acusan de lanzarles frases "obscenas, machistas e irrespetuosas". No obstante, desde la Universidad insisten en que "legalmente" no pueden expedientar al docente de oficio e instan a las alumnas a denunciar la situación ante la Unidad de Igualdad. Las denunciantes, añaden, están protegidas ya que el acusado no tendría acceso a su identidad. Desde el equipo rectoral, afirman que la rectora de la UV, Mavi Mestre, no ha tenido conocimiento de los hechos que denuncian las alumnas hasta que éstas se han encerrado en la facultad y que su indignación es "absoluta" ante estos hechos.

La reacción de la Universidad ha sido convocar una reunión "de urgencia" del equipo rectoral y entrevistarse con las alumnas que se han movilizado para animarlas a que presenten una denuncia formal. "El Consejo de Dirección ruega a la comunidad universitaria que denuncie ante la Unidad de Igualdad este tipo de comportamientos", añaden desde el rectorado.

Las estudiantes, en vez de denunciar los hechos ante la Unidad de Igualdad, lo que hicieron el curso pasado fue presentar un escrito en el buzón de quejas de la facultad. "Esta queja, como todas las demás que se presentan, las aborda de forma interna la facultad", detallan desde el rectorado. El equipo decanal, presidido por Rosa M.ª Bo Bonet, la primera decana en la historia de esta facultad, "atendió la solicitud de las estudiantes, advirtiendo al docente de su comportamiento y de la realización de un seguimiento cuando retomara sus actividades docentes", relatan desde el rectorado. Las fuentes aseguran que dicha resolución nunca fue transmitida por el decanato de la facultad al rectorado.

El docente está de año sabático

El profesor, que aunque no está dando clase este curso al estar disfrutando de un año sabático que ha socilitado, sigue yendo a la facultad y ha participado en los actos de la Universitat celebró el lunes con motivo del Día Internacional para la Eliminación de las Violencias contra las Mujeres. Esta situación indignó a las alumnas que denuncian el supuesto acoso, lo que desencadenó el encierro del martes. "El fin de esta acción es denunciar el papel pasivo y cómplice de la universidad, que es totalmente consciente de esta situación y no hace nada al respecto", detallaban en la convocatoria.