Un hombre de Wisconsin, Greg Manteufel, ha sufrido una rara infección en la sangre causada por una bacteria llamada 'Capnocytophaga canimorsus' y causada por el lametón de un perro.

La ‘Capnocytophaga canimorsus’ está presente en la saliva de casi todos los perros sanos y normalmente no es dañina para los humanos, pero existen casos puntuales en los que el organismo llega a envenenar la sangre, produciendo una sepsis y, eventualmente, la muerte. De hecho, los médicos consideran lo sucedido con este paciente como una "extraña casualidad".

Por lo general, esta bacteria solo afecta a personas que carezcan de bazo o tengan problemas con él, según informa la agencia Infobae. El diario británico 'Daily Mail' recuerda, en su información sobre este caso, que las personas con más probabilidad de experimentar un episodio así son quienes tengan problemas en su sistema inmunológico.

Tras pasar una semana en el hospital probando todos los antibióticos posibles para frenar la infección, los coágulos bloquearon la circulación sanguínea a sus extremidades y a los médicos no les quedó más remedio que amputarle ambas piernas a partir de la rodilla y después también las manos para salvarle la vida. Además, la falta de flujo de sangre hizo que la nariz se le pusiera negra y está a la espera de una operación para reconstruirla.

Según relata la mujer de Greg, Dawn Manteufel, el día que su marido enfermó había tenido contacto con ocho perros incluido el de ellos, por lo que la bacteria podría provenir de cualquiera. Los médicos reconocieron que se trata de un caso muy poco común y que más bien es una "extraña casualidad".

La reconstrucción de la nariz, adaptarse a unas extremidades protésicas y los tratamientos de rehabilitación hacen que ha Greg Manteufel le quede una larga y cara estancia en el hospital. Por el momento una campaña de GoFundMe ha recaudado unos 30.000 dólares en tan solo una semana para ayudar con los costes.