Las autoridades penitenciarias estadounidenses han negado a Troy Davis, condenado a muerte por haber matado a un policía en el estado de Georgia en 1989, la posibilidad de someterse a una prueba de polígrafo para demostrar su inocencia, según ha informado uno de sus abogados.

"Hemos venido aquí para intentar demostrar que el señor Davis es inocente. Desgraciadamente, el Departamento de Corrección nos ha negado esa oportunidad", ha declarado Stephen Marsh, según el periódico 'Atlanta Journal Constitution'.

El caso de Davis, quien, previsiblemente, será ejecutado a las 19.00 horas (a la 1.00 en la España peninsular) mediante una inyección letal, ha atraído la atención internacional. Casi un millón de personas han firmado una carta en Internet en la que piden que no sea ejecutado debido a las dudas que han surgido respecto a si fue él quien mató al agente Mark MacPhail en 1989.

Desde que Davis fue condenado, en 1991, siete de los nueve testigos clave se ha retractado o han cambiado su declaración. Algunos han asegurado que la Policía les coaccionó para que testificasen en su contra, y varios han dicho que fue otro hombre quien mató a MacPhail. Además, no hay pruebas físicas que relacionen al condenado con el crimen.

La Junta de Indulto y Libertad Condicional del estado de Georgia rechazó este martes la petición de clemencia presentada por Davis. Sus abogados, que afirman que hay pruebas nuevas que "exponen elementos clave falsos y engañosos en el caso del estado contra el señor Davis", presentaron luego en el Tribunal Superior del condado de Butts una moción para que se suspendiese la ejecución.

"Vamos a dar una oportunidad más al sistema judicial para evitar un desastre legal, constitucional y moral", dijo uno de ellos, Brian Kammer. Pero la Junta se ha negado a reconsiderar su decisión del martes.

Davis fue declarado culpable de matar a MacPhail junto a un restaurante Burger King disparándole dos veces cuando iba a auxiliar a un indigente que estaba siendo golpeado. La familia de la víctima cree que Davis es culpable y que debería morir.

Amnistía Internacional y la Asociación Nacional para el Avance de las Personas de Color van a realizar un acto de protesta este miércoles junto a la Prisión de Diagnóstico y Clasificación de Georgia.