La campaña del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) "Cambia la bolsa de una vez por todas" ha viajado hoy hasta Elche para concienciar a los jóvenes de que las bolsas de plástico son muy perjudiciales para el medio ambiente y es necesario que desaparezcan paulatinamente.

Así ha informado hoy a EFE el coordinador de la iniciativa, Antonio Ferrer, en el Punto de Información Móvil (PIM).

En este área, los organizadores han ofrecido regalos a cambio de bolsas de plásticos que hayan sido recicladas por los participantes.

Además, en este punto móvil han informado de los beneficios que acarrea una utilización sostenible de las bolsas de plástico en la actualidad y para las próximas generaciones, el impacto medio ambiental que supone el uso abusivo de las mismas y sobre todo las alternativas que existen.

Estas bolsas, que según Ferrer tardan alrededor de cincuenta años en destruirse por completo, son muy dañinas para el medio marino, en concreto para la fauna de este hábitat que la confunde con alimentos -principalmente medusas- y mueren al ingerirlas.

Por otra parte, cada vez que consumimos una bolsa de plástico se emiten aproximadamente cuatro gramos de dióxido de carbono.

Por ello, la alternativa que plantea esta iniciativa es que, al hacer la compra o para darle cualquier uso, se empleen bolsas de tela, que canjea por las de plástico esta campaña, o las bolsas biodegradables, que son comerciadas por algunos supermercados.

Asimismo, el coordinador de la campaña ha destacado que todos los materiales que se han empleado para disponer esta actividad son reciclables, no han generado residuos y, por lo tanto, su impacto ambiental será el mínimo posible.

El reto de esta actuación es conseguir que el consumo de bolsas comerciales de un solo uso caiga un 50%, y que, a través de un calendario de sustitución de plásticos no biodegradables, se pueda llegar a su eliminación progresiva.

Esta iniciativa del MARM tiene el objetivo de que los estudiantes universitarios realicen un consumo sostenible de las bolsas de plástico, que promuevan un movimiento social que cambie los hábitos de consumo, y que logre dar un uso sensato a este recurso.