Al término de su 91 sesión, el Comité denunció que las enfermeras búlgaras y el doctor palestino liberados en julio "fueron forzados a firmar papeles que absolvían al Estado de toda responsabilidad sobre torturas y malos tratos que les infligieron".

"Hay indicios de que fueron sometidos a actos de tortura" para forzarlos a confesar, señaló hoy uno de los 18 expertos que conforman el comité, Abdelfattah Amor.

Posteriormente, sus declaraciones fueron utilizadas para condenarlos a muerte bajo la acusación de haber infectado a más de 400 niños con el virus del sida en un hospital infantil de Bengasi, agregó.

El pasado julio fueron finalmente liberados y trasladados a su país de origen, tras haber permanecido encarcelados durante más de ocho años en Libia.

El Comité, formado por expertos de diferentes nacionalidades, finalizó hoy su 91 sesión y presentó las conclusiones sobre distintos países, entre ellos Libia y Costa Rica.

En los documentos difundidos, los miembros reiteran su preocupación por "el gran número de desapariciones forzadas y casos de ejecuciones sumarias, extrajudiciales o arbitrarias que no han sido clarificadas" por Libia.

Critican, asimismo, que no existe una definición clara de terrorismo y que algunos de los elementos del código penal para combatir ese fenómeno "no encajan con los pactos internacionales".

El Comité denuncia, asimismo, la desigualdad entre hombre y mujer y, en ese sentido, pide a Libia que revisen las leyes para asegurar la equidad entre ambos sexos, en particular en los aspectos relacionados con el divorcio y las herencias.

El Comité está formado por 18 expertos de diferentes países y forma parte del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ACDH);, pero su funcionamiento es completamente independiente del Consejo de Derechos Humanos (CDH);, integrado por 46 países miembros de la ONU.