Las inversiones culturales de la Generalitat en la provincia han abierto un nuevo conflicto entre la Generalitat y la Diputación de Alicante. El equipo de gobierno de la institución provincial ha elaborado un informe comparativo del gasto público cultural de la Generalitat en las tres provincias que constata que la Diputación de Alicante refleja mayor peso del gasto cultural en su presupuesto. Según denuncian PP y Ciudadanos en la Diputación,la provincia parte de una situación de desventaja con relación a la distribución por población.
De los más de 45 millones de euros en inversión territorializada por parte de la Generalitat, tan sólo llegan a Alicante 600.000 euros, un 1,33% de ese gasto, frente a los 6,3 millones que van a parar a Castellón, un 14% del presupuesto, o los más de 38 millones que se destinan a Valencia, casi un 85%. Así lo denuncia el equipo de gobierno a raíz de un informe que analiza el presupuesto de la Generalitat Valenciana y los de las tres diputaciones provinciales, así como las cuentas anuales y sus respectivos organismos públicos con competencia en materia cultural. El PP ha denunciado que hay un «desfase territorial abismal» en cuanto al reparto financiero del gasto público cultural en cada una de las tres provincias «con un claro y elevado desequilibrio de la provincia de Alicante, que perdería más de 20 millones de euros al año en desarrollo cultural, conforme a su población, con relación a las otra dos provincias», según aseguraron a este diario fuentes del PP.
Al enfrentamiento por las competencias sociosanitarias que asume la institución provincial, ahora se suma el agravio comparativo por el que la Diputación denuncia que ha tenido que realizar «un esfuerzo mayor» a nivel presupuestario, que cifran en 10 millones de euros para paliar este déficit , asegurando que tiene que sostener íntegramente el coste del Auditorio de la Diputación de Alicante y su Orquesta Sinfónica ADDA con un presupuesto de 6,1 millones de euros, sin ninguna aportación de la Generalitat Valenciana, «cuando centros musicales semejantes con sus respectivas orquestas son financiadas totalmente por la Generalitat Valenciana como el Auditorio y Palacio de Congresos de Castellón, con un coste en su gestión, mantenimiento y programación de 2,6 millones de euros y el Palau de les Arts Reina Sofía con una aportación anual del presupuesto de la Generalitat a su Fundación de 18,5 millones de euros», admiten desde el PP tras el informe realizado para analizar la situación. También añaden desde el Palacio Provincial que mantienen el Museo Arqueológico Provincial con un presupuesto de 3,8 millones de euros, el Instituto de Cultura Juan Gil Albert con 1,4 millones euros y el Museo de Bellas Artes de Alicante con 400.000 euros. De todos ellos, tan solo el Marq recibe una aportación de la Generalitat por importe de 140.000 euros. El equipo de gobierno denuncia que en la provincia de Valencia y Castellón la Generalitat financia prácticamente la totalidad del coste de museos similares.
La vicepresidenta y diputada de Cultura, Julia Parra, también ha elevado el tono contra estos datos y ha dicho que «nadie puede rebatir que, en materia cultural, la Diputación es la más perjudicada en el reparto presupuestario con una diferencia abismal con respecto a las otras dos provincias. Es una injusticia con la que hay que acabar». Parra ha defendido que, «pese a esta situación, la cultura es una de las prioridades de la Diputación de Alicante».
Otro condicionante para el Fondo de Cooperación Local
La Diputación de Alicante pretende abordar su adhesión al Fondo de Cooperación Municipal que impulsa el Consell, pero pone como condicionante resolver el conflicto por las competencias impropias que la institución provincial asume en materia social y sanitaria. Ahora, la institución provincial también denuncia la «brecha cultural» que la Generalitat ha provocado. La diputada Julia Parra ha anunciado que iniciará el próximo curso político en septiembre con la petición de un encuentro con el conseller de Cultura, Vicent Marzà: «Es más que necesario abrir un diálogo para poner a la Diputación de Alicante en el lugar que le corresponde, a la par que sus homólogas, y también queremos que venga y vea de primera mano las grandes cosas que se están haciendo desde nuestros centros culturales», señala.
