El acuerdo para formar un bipartito en Xixona se produce después de un largo recorrido de estrategias que comenzó con un acuerdo de gobierno en Torrent en pleno confinamiento. En abril, Ciudadanos y PSOE sellaron un un pacto para lo que queda de mandato en el municipio valenciano. Fue el acuerdo que puso en evidencia el acercamiento de Toni Cantó a la izquierda. Bastó con un par de contactos para rubricarlo. A ello se sumó la buena relación de Toni Cantó con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el síndic del PSOE en las Cortes, Manolo Mata. Tras esta maniobra política en Torrent, los naranjas se abrieron a acordar varias propuestas con el PSOE en las Cortes, se acercaron a la izquierda para buscar una salida a la crisis sanitaria, económica y social y llegaron a ofrecerse para negociar los presupuestos con el Botànic. En esta secuencia de hechos, Toni Cantó también anunció su voluntad de revisar los pactos políticos a partir de septiembre.
Las alarmas sonaron y todos los focos se pusieron en el acuerdo de la Diputación de Alicante, una situación que el líder autonómico de Cs ha avivado al criticar la «cerrazón» de Carlos Mazón por su negativa a aprobar el Fondo de Cooperación Municipal que impulsa la Generalitat Valenciana. En la provincia de Alicante, Ciudadanos participa en el equipo de gobierno en los ayuntamientos de Daya Nueva, Benejúzar, Sant Joan, Alicante, Calpe, El Campello, Callosa de Segura, Mutxamel, San Fulgencio, Orihuela, Muro de Alcoy y ahora en Xixona. Además, ostenta la Alcaldía en Guadalest, Castalla y Granja de Rocamora. Ayer todas las miradas comenzaron a centrarse también en Sant Joan, aunque los naranjas aseguraron que en estos momentos ese pacto no se toca. «De momento no hay novedad», apostillaron desde Cs. También fuentes del PP confirmaron que sobre la mesa no hay ninguna negociación para presentar una moción de censura con el fin de desbancar a los socialistas de la Alcaldía.
Por otra parte, fuentes del PP informaron de la posible moción de censura en La Torre de les Maçanes, que en estos momentos está gobernada por el PSOE con Compromís. Gracias al voto de una concejala tránsfuga, el PP podría obtener la Alcaldía. Sin embargo, desde el PSOE mostraron ayer sus dudas sobre la legalidad de esta moción de censura.
Francés tiende la mano a impulsar un pacto de gobierno
El portavoz socialista en la Diputación, Toni Francés, tendió ayer la mano a Ciudadanos para apartar a Carlos Mazón de la presidencia y reconoció que, aunque el pacto en Xixona es una decisión en clave local, denota el entendimiento de los naranjas con los socialistas. «Siempre dije que iba a estar la mano tendida y este año se han perdido muchas oportunidades», según Francés, quien añadió que «esa mano va a estar y, si Ciudadanos entiende que es mejor un gobierno formado por el PSOE en la Diputación como en Xixona, estamos dispuestos a darle el impulso». Por su parte, el portavoz de Compromís, Gerard Fullana, manifestó que «este pacto no es una buena noticia para el progresismo» y demuestra que «para conseguir gobiernos progresistas es indispensable que Compromís esté fuerte».
