El jefe del Consell, Ximo Puig, ha anunciado esta mañana en las Corts deducciones fiscales para los 200.000 trabajadores con rentas más bajas afectados por los ERTE beneficiarios de la ayuda de la Generalitat. También ha dicho que se aprobarán desgravaciones fiscales para las donaciones, tanto dinerarias como en especie, destinadas a minimizar el impacto de la covid-19 o a la investigación.
El Consell pretende garantizar que el complemento autonómico a los afectados por ERTE no penalice fiscalmente en el IRPF. Asimismo, quiere reconocer la generosidad ante la enfermedad, han explicado fuentes del Ejecutivo.
La sesión de control al Consell en las Corts ha estado marcada por el tono duro del PP y Vox contra el Consell y la actitud diferente de Ciudadanos. Tras el primer cruce de ataques entre diputados del PP y miembros del Consell, Toni Cantó ha lamentado el "espectáculo" batallando por el pasado. "Es penoso y me gustaría mirar al futuro y dar un ejemplo muy distinto a los valencianos".
Isabel Bonig ha utilizado la huelga de los médicos residentes (MIR) para criticar la "nefasta" gestión del Consell, "mientras usted (Puig) yace plácidamente en las playas de Formentera". También ha cuestionado el acuerdo social por la reconstrucción firmado ayer con los agentes sociales. Ha dicho al respecto: "Res de profit, mucho anuncio y poca gestión" y ha acusado de "regar con subvenciones" a los sindicatos.
Puig le ha contestado: "Desde el catastrofismo y los gritos no salvaremos vidas". Y ha pedido a Bonig que reconsidere su planteamiento de confrontación. "Me parece grave su menosprecio a la sociedad civil, a empresarios y sindicatos. Es democracia pura y les dice que son paniaguados".
El ambiente se ha caldeado aún más cuando Eva Ortiz (PP) ha insistido con las ayudas al valenciano y el papel de las empresas del hermano de Puig. El conseller Vicent Soler ha calificado a continuación al PP como "el partido más corrupto de la historia de España" y ha dicho que le producía ternura la actitud de los populares 5 años después porque demostraba que no habían encontrado ninguna mancha en el Ejecutivo.
Cantó (Cs) fue el encargado de cambiar el tono. Se ha felicitado de los acuerdos de los últimos días y ha pedido a Puig que tutele a su grupo parlamentario por su actitud en la comisión de reconstrucción en las Corts, porque "usted parece más centrado que su grupo".
Mientras tanto, Compromís y PSPV han escenificado un baile de salón parlamentario, ya que Fran Ferri ha sacado en la tribuna los últimos descubrimientos sobre el rey emérito Juan Carlos I criticando que la derecha avale "el fraude fiscal" al gritar vivas al rey, pero no ha hecho mención a los socialistas, que no respaldaron tampoco pedir al Congreso que investigue al padre del actual rey. Puig, por su parte, ha contestado con un alegato contra el fraude fiscal, pero sin mencionar la monarquía.
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