La comisión ejecutiva nacional del PSPV valoró ayer favorablemente la gestión del Consell en la crisis del coronavirus en contraposición con la de otras autonomías y celebró la actitud del Gobierno de España pese a la confrontación que se ha vivido en el Congreso y los constantes reproches de la oposición. El presidente de la Generalitat y secretario general del PSPV, Ximo Puig, basó su intervención en tres ideas: reforzar el modelo autonómico, apoyar el Ingreso Mínimo Vital y destacar el cambio de criterio del fondo de emergencia del Gobierno con un reparto de 16.000 millones atendiendo las reivindicaciones de la Comunidad.
En primer lugar, Puig puso en valor el papel de las autonomías y del Consell en la gestión de la crisis del coronavirus. Consideró que «se ha avanzado en la mirada federal» a la vez que destacó que «se ha demostrado que la realidad de España es diversa y plural y su gestión requiere una apuesta clara por la cogobernanza». El secretario general de los socialistas valencianos intervino ante la ejecutiva de la formación, celebrada telemáticamente, en la que instó a su formación a «continuar trabajando en la vía valenciana del acuerdo y la unidad de acción».
Puig subrayó la importancia de articular una respuesta conjunta alejada de la crispación y la confrontación, en clara alusión al entendimiento que se ha producido en las Cortes durante la crisis frente a la falta de acuerdos en Madrid. Según el presidente, se debe actuar «desde la serenidad, la prudencia y el impulso a la convivencia», frente a una derecha que, según criticó «está en situación de rebeldía cívica». El dirigente socialista aseguró que la gestión de la Generalitat durante el periodo del estado de alarma ha sido «eficiente e innovadora» y recordó, en estes sentido, la puesta en marcha del proyecto de investigación de la incidencia del coronavirus en aguas residuales, así como «la apuesta por el análisis de datos».
En segundo lugar, repasó las medidas del Gobierno central durante la pandemia y consideró «histórico» el Ingreso Mínimo Vital, que definió como «una gran aportación para mantener la equidad». Puig no quiso entrar en las críticas de Compromís sobre las duplicidades que puede generar esta prestación y la renta valenciana de inclusión si no se gestionan desde la Comunidad. «Lo importante de esta ayuda son los receptores de las políticas, y aquí lo esencial es que los valencianos en situación de vulnerabilidad recibirán 337 millones»,afirmó. En tercer lugar, el presidente hizo referencia a otro de los temas que más críticas ha generado. En cuanto al fondo no reembolsable de 16.000 millones para las comunidades autónomas, Puig celebró el cambio de criterio del Gobierno para dar más peso a la población: «El nuevo diseño atiende las reivindicaciones de la Comunidad».En este sentido, reivindicó que el tramo destinado a paliar los ingresos propios de las comunidades «tenga en cuenta el esfuerzo fiscal real» y no se permita «que los que hacen dumping fiscal tengan más ayuda, porque eso potenciaría la falta de equidad».
También agradeció «el enorme esfuerzo económico» del Ejecutivo hacia la Comunidad y destacó que «se ha trabajado y se sigue trabajando para reforzar el Estado del bienestar y de las autonomías». Pero Puig también adquirió un tono reivindicativo al pedir de nuevo un cambio de modelo de financiación autonómica porque, en su opinión, retrasarlo provocaría que la recuperación se produjera a velocidades diferentes: «Tenemos que levantarnos y poner en marcha ese gran acuerdo que dé garantías a la ciudadanía». De cara a la reconstrucción, el secretario general del PSPV-PSOE manifestó la necesidad de que el crecimiento y la redistribución vayan de la mano.
Hubo un buen número de intervenciones durante la sesión telemática. Sobre la gestión del Gobierno de España, los intervinientes reconocieron ciertas discrepancias en las primeras decisiones aunque aseguraron que «el resultado final ha sido bueno» y de coordinación institucional. La presidenta del PSPV, Juana Serna pidió una mirada más incisiva en las medidas para la conciliación mientras los alcaldes insistieron en la importancia que a día de hoy tiene prestar ayudar a los ayuntamientos en la reconstrucción.
Primera comisión ejecutiva desde el inicio de la crisis
El PSPV celebró ayer su primera ejecutiva tras la crisis del coronavirus. A la reunión telemática asistieron numerosos alcaldes y dirigentes alicantinos. Puig destacó la importancia de volver a una normalidad mejor que la de antes del virus: «No queremos volver a la antigua normalidad sino a una normalidad mejorada; tenemos que asumir las lecciones de la historia». El dirigente aseguró que la gestión de la Generalitat durante el estado de alarma ha sido «eficiente» y añadió que «ahora más que nunca, la Comunidad necesita un Partido Socialista fuerte que siga dando respuesta a las demandas».
