Entre apelar a la unidad y pedir que se «cierren filas» o hacer un llamamiento a la insumisión y criticar al gobierno de Ximo Puig por ser «incapaz, dos meses después del estado de alarma, de presentar un solo plan», hay muchas millas de distancia, aunque los autores de estas frases sean dos diputados de las Cortes, los dos alicantinos, y los dos componentes de la comisión por el pacto de reconstrucción de la Comunidad Valenciana. El planteamiento inicial es de Fernando Llopis, diputado de Ciudadanos, y la segunda exposición es de José Juan Zaplana, parlamentario del Partido Popular. 48 horas antes de constituirse la comisión de la que debe salir la «hoja de ruta» de la reconstrucción sanitaria, social y económica, ambas formaciones de derecha, las únicas que han optado por no enviar a sus síndics parlamentarios a este foro, muestran posiciones muy alejadas. Ciudadanos se abre a pactos con el Botànic y deja solo al PP en la oposición frontal a la Generalitat.
Con un Vox alejado por ahora de estridencias, apoyando esta comisión y dispuesto a dar su respaldo a medidas para «salvar vidas y familias» y no para «consolidar las competencias autonómicas y salvar gobiernos», según aseguró ayer la síndica Ana Vega, es el PP quien está poniendo más impedimentos en el arranque de la comisión, tanto a nivel de forma y de fondo. Dando por hecho que dos de sus parlamentarios más duros serán los representantes populares en este organismo, los portavoces en las Cortes de Economía, Rubén Ibáñez y de Sanidad, José Juan Zaplana, el PP ya ha marcado distancia: «La comisión de reconstrucción debe ser de máxima lealtad a los valencianos y no de sumisión al Botànic», aseguró Rubén Ibáñez. Por su parte, José Juan Zaplana indicó que, una vez que Ximo Puig «ha dejado la elaboración de un plan en manos de las Cortes, queremos dar esperanza y que los valencianos vean que una forma de hacer política más ágil es posible a pesar de tener un gobierno repleto de cargos públicos y asesores incapaces de haber presentado medidas frente a esta crisis», añadió.
Ingenieros «resolutivos»
Desde Ciudadanos, su lectura sobre la elección de sus representantes estriba en que se trata de dos ingenieros, Fernando Llopis y Carlos Gracia, que se les presume «más resolutivos y prácticos, que no divagamos» y que queremos que la comisión «sea útil y sirva para algo» y que cuente con representantes de la sociedad civil y expertos en diferentes materias, explicaba ayer Fernando Llopis. De momento, Llopis, que ejerce de secretario de su grupo parlamentario, adelantó a este diario que el viernes que viene, fecha en la que se constituirá oficialmente la comisión, propondrá un serie de invitados para que comparezcan, entre ellos profesores de la Universidad de Alicante y profesionales del sector industrial y hotelero de la provincia, «gente que nos pueda decir cosas», aseveró.
En todo caso, Llopis considera imprescindible fijar el punto de partida y conocer «la situación real» de la Comunidad para saber «hasta dónde se puede llegar y con qué recursos». La visión de Fernando Llopis es muy clarividente: «Ahora mismo, los valencianos estamos solos y como empecemos a ir divididos en esta comisión, lo vamos a pasar mal. Hay que cerrar filas en la Comunidad Valenciana, estamos solos y no nos van a ayudar de Madrid. Toca ir juntos otra vez y, por mi carácter, queremos llegar a soluciones de consenso reales», concluyó.
Los tres socios del Botànic apuestan por escuchar la voz de ciudadanos y expertos
Las fuerzas que sustentan al Consell destacan el regreso de la actividad al parlamento a pesar de las medidas sanitarias
Para las fuerzas políticas que sustentan el Gobierno del Botànic, la comisión de la reconstrucción debe marcar un antes y un después en la lucha contra la pandemia. El portavoz del PSPV, Manolo Mata, afirmó ayer que «hay un mañana post-Covid y ese mañana tiene que ser pensado, se debe escuchar a especialistas, evaluar las situaciones y seguir confiando en que el género humano tiene aún mucho por progresar sin dejar a nadie atrás». Mata destacó que, «con las limitaciones de los decretos de alarma» (el pleno de mayo se alargará tres días para cumplir con todas las exigencias sanitarias), el parlamento valenciano «está en la última fase de la desescalada» y «el regreso a la actividad parlamentaria normal demuestra que los grupos del Botànic quieren un parlamento plural, vivo, diverso y que esté informado».
Por otra parte, Fran Ferri, síndic de Compromís, subrayó que la posición de su grupo respecto a la comisión de la reconstrucción es intentar que «vaya más allá de los partidos» y que se escuche a la ciudadanía y a los expertos. Ferri insistió en que hay que «reivindicar más recursos ante el Gobierno central». Desde Unidas Podemos valoraron el arranque de los trabajos de la comisión asegurando que en el plan de trabajo de la comisión aportarán sus propuestas para «blindar, ampliar y reforzar los servicios públicos como la sanidad, la educación o los servicios sociales», explicaron ayer fuentes de esta formación.
