La consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, ha solicitado por carta al Ministerio de Agricultura ayudas extraordinarias para el sector pesquero y acuícola. Esta petición pretende paliar el impacto que el estado de alarma decretado por la crisis del Covid-19 está causando en el sector.

Mollà ha propuesto dos líneas de apoyo económico a través de la modificación del Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca (FEMP) y de una modificación extraordinaria de las ayudas destinadas al sector pesquero y acuícola en los Presupuestos Generales. Pero, igualmente, la Conselleria ha planteado la posibilidad de que el sector primario pueda acogerse a las medidas del Gobierno que contemplan tanto prestaciones extraordinarias por el cese de actividad y para flexibilizar el ajuste temporal de la plantilla y evitar despidos, es decir, los ERTE.

Periodos de veda

La consellera ha informado de que el efecto en el sector primario está siendo desigual, ya que, mientras la agricultura y la ganadería están comercializando buena parte de su producción, el cierre de los establecimientos de hostelería y restauración ha reducido la venta de pescado en un 50% que se ha visto acompañado, además, con un desplome de los precios. Asimismo, en su carta al Ministerio, la consellera ha pedido medidas adicionales para el adelanto y adecuación de los periodos de veda. Así, el ajuste de las paradas temporales al mes de abril que plantea Mollà repercutiría en la pesca de arrastre de fondo y cerco en determinadas zonas del litoral mediterráneo. Una fórmula a la que podrían acogerse 207 barcos de arrastre y 41 de cerco, solo en la Comunidad.