Un «espacio común de debate territorial» que acoja las negociaciones sobre cuestiones primordiales para las autonomías, como su financiación, el conflicto del agua o la distribución de recursos e inversiones. Esa sería el papel ideal del Senado, el que de verdad le concede la Constitución en lugar de ser una cámara de segunda lectura, siempre a espaldas del Congreso. Un rol con una finalidad más propicia y lógica en una España territorial muy diversa. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, compartió ayer con la presidenta del Senado, Pilar Llop, la necesidad de que la Cámara Alta se vuelque en su papel territorial como centro idóneo para el debate con todas las comunidades autónomas, objetivo que Puig lleva promoviendo desde hace tiempo y que tuvo la oportunidad de expresar en persona a la responsable de una institución, hoy en día, más desubicada que útil.
Mientras en el Palacio de la Moncloa se celebraba la primera reunión de la mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat de Cataluña, Puig defendió la necesidad de establecer «marcos multilaterales, imprescindibles para conseguir una financiación autonómica «justa» que «conceda equidad a los ciudadanos».
Conferencia de Presidentes
Puig destacó que, a falta de que se active la Conferencia de Presidentes -el órgano de máximo nivel político de cooperación entre el Estado y las comunidades autónomas, que no se reúne desde enero de 2017-, el Senado debe ganar más protagonismo. Y así debería ser en los próximos meses en los que los procesos electorales abiertos en Galicia, el País Vasco y Cataluña impiden convocar esta cita trascendental para regularizar el actual estado de las autonomías. Por eso, detalles como el que ayer Pilar Llop confirmara que el Senado acogerá comisiones sectoriales (la próxima semana se celebra en la Cámara Alta una sobre Cultura) son «el camino» para afrontar los «grandes debates pendientes» sobre la distribución de recursos, el agua o las infraestructuras que, según el presidente Puig, deben llevarse «desde la lealtad constitucional» al Senado porque, agregó, «si esta Cámara tiene un sentido» es el que le da la Constitución al definirla como Cámara territorial.
El primer líder autonómico que se reúne con la presidenta Pilar Llop
Ximo Puig es el primer presidente de comunidad autónoma que le ha solicitado una reunión a la máxima responsable del Senado y, por tanto, fue el primero de los líderes territoriales que mantuvo un encuentro con la presidenta de la Cámara Alta. El hecho de abrir un calendario de reuniones en el que otros mandatarios no han mostrado tanto interés, sorprendió a Puig, que valoró que Pilar Llop quiera conventir la cámara en una casa abierta a los territorios.
Defensa del diálogo en Cataluña pero con igualdad para todos los ciudadanos
El jefe del Consell apoya la mesa abierta por Sánchez y Torra si no se genera un trato injusto entre comunidades
La coincidencia, también en Madrid, de la primera reunión de la mesa de diálogo sobre Cataluña celebrada ayer en La Moncloa fue tema de conversación a la salida de la reunión entre Ximo Puig y Pilar Llop. El presidente de la Generalitat Valenciana valoró de forma positiva el arranque de la mesa del diálogo, ya que «entiendo que pueda haber una relación bilateral entre Catalunya y el Gobierno como la pedimos nosotros en la Comunidad Valenciana en cuestiones que nos afectan a nosotros y no a otras comunidades autónomas», por lo que ha pedido «igualdad entre ciudadanos y singularidad entre territorios».
Para Puig, «hay que potenciar el marco multilateral», para que sea «fundamental que se garantice la igualdad entre ciudadanos atendiendo a las propias singularidades». El jefe del Consell apeló a la Constitución al asegurar que cuando la Carta Magna habla «de nacionalidades y regiones también indica que las realidades territoriales no son iguales ni homogéneas, hay diversidad, lo que no debe generar desigualdad», puntualizó. En todo caso, consideró «muy positivo» que se abra «un debate y un diálogo con Cataluña, y también dentro de Catalunya. Cataluña es muy importante para España, y por tanto, para la Comunidad Valenciana, o más, porque somos vecinos. Nos interesa una situación de mayor convivencia y complicidad», dijo.
