A un día para que expire el plazo de presentación de candidaturas a la dirección general de À Punt, la incógnita sobre cuántos pretendientes estarán dispuestos a asumir el timón de la radiotelevisión pública valenciana hasta 2023 se prolonga hasta el último momento. Algunos perfiles descartados entonces deshojan la margarita antes de lanzarse a repetir en la nueva fase de selección. No es el caso de uno de los finalistas que, en el primer procedimiento, consiguió la mejor puntuación. Josep Ramón Lluch -jefe de programas de Ràdio 9 a principios de los 90-, no figurará esta vez entre los aspirantes. También se han borrado de la convocatoria otros candidatos con trayectoria en la gestión televisiva, como Andreu Alberola.

Por el contrario, varios extrabajadores de la primera etapa de RTVV, como Sebastián Sánchez o Juli Esteve, valoran la opción de volver a presentarse. En la misma tesitura se encuentra Pere Valenciano, director de El Periódico de aquí. Artur Balaguer -uno de los represaliados en Canal 9 en los años de control del PP- es otro de los nombres que podría reeditar candidatura. La que, de momento, tampoco concreta si optará a revalidar el cargo -aunque distintas voces apuntan a que sí- es la actual directora de À Punt, Empar Marco, cuya sintonía con el consejo rector ha quedado en entredicho en los últimos meses. Su primer mandato tiene fecha de caducidad: marzo.