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El PSPV tiende la mano a Ciudadanos para cambiar el gobierno de la Diputación

«Habrá movimientos. Cs sólo puede volver al centro y eso abre la posibilidad de una una moción de censura», asegura el portavoz socialista Toni Francés

Carlos Mazón acudió ayer a la Feria Gastrónoma celebrada en la ciudad de València. INFORMACIÓN

Ciudadanos no atisba el horizonte al que se asoma tras la debacle electoral Ciudadanos debacle electoral del 10-N y la dimisión de Albert Rivera. En su empeño por volver a ser una alternativa de centro, la formación podría activar el «plan B» para cambiar el paso y enmendar los errores cometidos, entre ellos su viraje a la derecha. Pero eso es sólo una posibilidad. El hundimiento de los naranjas en las elecciones generales podría apuntar a nuevas estrategias políticas para decidir si enderezan el rumbo con otras maniobras. En ese escenario, la Diputación de Alicante se podría convertir en el mayor ejemplo en la Comunidad Valenciana para escenificar su intento por romper las actuales alianzas, en este caso con el gobierno que pactaron el pasado mes de julio con el PP para dar la presidencia a Carlos Mazón. Y los socialistas, como mínimo, están dispuestos a analizar la situación pasadas ya las urnas.

Los últimos desencuentros entre los dos socios han abierto un clima enrarecido que es patente en el día a día. A esta falta de diálogo se suma una hecatombe histórica que les ha hecho perder nada menos que 47 diputados para provocar la caída de Albert Rivera. El PSPV ha encontrado en esta situación el caldo de cultivo para abrir la puerta a una moción de censuray hacerse con la principal institución de la Comunidad en manos del PP. La aritmética lo permite puesto que los populares empataron a 14 diputados con el PSPV, por lo que ambos necesitan a los dos diputados que logró Ciudadanos para lograr la mayoría necesaria en una cámara con 31 diputados. Compromís no resultaría decisivo en esta suma aunque también ha mostrado su interés por «regenerar» la institución provincial y apoyaría este movimiento aunque no entrara en el gobierno.

Los dos diputados de Cs se van a centrar en la gestión de la corporación y esperan el congreso que deben celebrar los naranjas

El PSPV quiere mover ficha para acercarse a Ciudadanos. Fuentes de la dirección socialista confirmaron ayer a este diario que dejarán pasar el duelo electoral que en estos momentos están viviendo y abordarán los contactos en unos días. El portavoz del PSPV en la Diputación, Toni Francés, apuntó que Ciudadanos tiene por delante un momento de reflexión profunda para reorientar su política del último año: «El resultado ha sido peor de lo que esperaban. Nacieron para ocupar un espacio en el centro y se han escorado a la derecha y hasta Vox . Como consecuencia de esta debacle, Francés considera que el partido solo puede volver al centro político y es, precisamente ahí, «donde se abre la posibilidad de un acuerdo con los socialistas para una moción de censura». Tras la dimisión de Rivera, dirigentes del partido reconocieron ayer que los resultados fueron «malísimos sin paliativos», que esta vez no fueron «capaces» de reponerse y dar la vuelta a las encuestas y que eso obliga a una «autocrítica muy profunda». Desaparecieron en once comunidades autónomas y no se han posicionado como fuerza más votada en ningún territorio. Sin duda, una caída libre que merece una reflexión y revisar la estrategia. Para Toni Francés, un hundimiento como este lleva a cambiar el rumbo y, en su opinión, «la Diputación es el ejemplo y ahora tenemos una oportunidad para que tendamos la mano y tratemos de alcanzar un acuerdo». De todas formas, Toni Francés, quien aseguró que «habrá movimientos» dejó claro que es una decisión que corresponde al PSPV y de la que debe opinar a su vez la dirección federal.

Por su parte, los dos diputados provinciales de Ciudadanos confirmaron ayer a este medio que todavía no se ha producido ningún contacto con los socialistas y precisaron que en estos momentos su intención es apostar por la gestión del departamento de Transparencia y la gestión. Según aseveró Javier Gutiérrez «estamos en una situación de análisis y tiene que haber una asamblea donde se vea la nueva dirección del partido, pero en el día a día el PP nos ha dado la oportunidad de sacar adelante un proyecto en común». El diputado reconoció los roces entre PP y Ciudadanos y dijo que «hay inquietudes diferentes y las estamos salvando a base de diálogo. Tenemos ritmos diferentes pero se está resolviendo siempre». Según Gutiérrez «estamos cambiando los cimientos de la Diputación, sería un flaco favor a los ciudadanos decidir esto en caliente después de un resultado electoral. Esta decisión se tiene que tomar en frío y con consenso». La vicepresidenta y diputada de Cultura Julia Parra reconoció que ayer fue un día duro por la dimisión de Albert Rivera al frente de Ciudadanos, apuntó que no hay contactos por ahora con el PSPV e insistió en el área de Transparencia, que está a su cargo.

Aunque Carlos Mazón no quiso hacer declaraciones a este periódico sobre la posibilidad de un pacto entre Ciudadanos y PSPV tras el resultado de los comicios del 10-N, fuentes de Presidencia aseguraron que «mal deben estar los socialistas en Alicante si lo único que se le ocurre es agitar el fantasma de una moción» añadiendo que «somos un partido serio como Cs y no jugamos con nuestro electorado». Las mismas fuentes lamentaron que «los socialistas insulteb a sus votantes y siga buscando nubes donde no hay tormenta. A rebufo de Gerard Fullana, poco tienen que hacer».

Agenda en una feria gastronómica para el dirigente del PP

El presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, acudió ayer en València a la feria Gastrónoma 2019, donde la provincia celebraba el «Día de la Costa Blanca» para mostrar el potencial culinario del territorio, que atesora 15 Estrellas Michelin repartidas en once establecimientos. Mazón, quien presidió el almuerzo ofrecido por el Patronato Provincial de Turismo, habló de la gastronomía pero guardó silencio sobre una posible moción de censura.

Marcar «distancias» con el PP en el gobierno municipal de Alicante para ganar «visibilidad»

La formación naranja presionará a Barcala con las negociaciones de los Presupuestos de 2020: «Vamos a defender nuestras prioridades»

C.PASCUALLa debacle electoral de Ciudadanos el 10-N tendrá su derivada en el Ayuntamiento de Alicante, donde el PP y Ciudadanos comparten gobierno desde hace cinco meses, tras las últimas elecciones municipales. O eso pretende la formación naranja, que busca hacerse hueco tras un inicio de mandato en el que han permanecido a la sombra de los populares, sobre todo del alcalde, Luis Barcala.

El objetivo de «marcar distancia» con los populares para ganar en «visibilidad» no es nuevo del todo, ya estaba sobre la mesa, pero se incrementará tras el batacazo electoral. Son conscientes de que deben ganar espacio en el gobierno municipal para «desmarcarse» del PP, para no parecer marionetas en manos de los populares, que atesoran muchos años más de experiencia de gobierno. Una misión, eso sí, nada sencilla tras el reparto de competencias realizada en el inicio del mandato, donde Cs se quedó Turismo, Urbanismo, Cultura, Deportes y poco más.

Los primeros movimientos más visibles se producirán con la negociación de los Presupuestos, el primero compartido entre ambos grupos en la ciudad de Alicante. Ciudadanos pretende marcar «líneas rojas», exigencias que el PP deberá cumplir sí o sí para aprobar las cuentas municipales de 2020. Ya hubo un intento del alcalde de realizar una negociación conjunta, no por partidos sino por áreas, pero Cs se negó. También lo hizo a compartir comida recientemente con Barcala y el resto de ediles populares, según afirman los naranja. «Vamos a defender nuestras prioridades», señalaron desde la formación. Y es que Cs quiere que se evidencie que el gobierno municipal está formado por dos grupos distintos, con puntos en común pero también discrepancias políticas, algo así como sucede en el Botànic, donde están marcadas las diferencias entre el PSPV, Compromís y, desde junio, Podemos.

Los naranja quieren más protagonismo, marcando territorio con Barcala. Han comprobado que a la sombra de su socio, como hasta la fecha, el PP crece y ellos se desploman, y ambos además por encima de la media a nivel nacional.

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