El ascenso de Vox en las pasadas elecciones generales ha contenido el crecimiento del PP, en especial en la Comunidad Valenciana donde la formación que lidera Santiago Abascal se acerca peligrosamente a la organización de la gaviota. La brecha entre ambos partidos se ha estrechado y los populares ya miran de reojo a un partido donde se han trasvasado miles de votos. Ahora bien, los populares valencianos también tienen que agradecer algo estas elecciones a la extrema derecha. De hecho, el análisis sosegado de los datos invita a pensar sin mucho margen de error que Vox ha facilitado al PPCV incrementar en tres sus escaños en el Senado gracias a la decisión de solo presentar una candidatura por cada uno de las circunscripciones y no una terna como han hecho el resto de las formaciones.
Así, las candidaturas del PP en València, Alicante y Castellón se han visto beneficiadas ya que todo apunta a que los número uno y dos obtuvieron cruces de más procedentes de aquellos votantes de Vox que solo podían marcar la casilla de un aspirante. El sistema de elección del Senado da derecho a marcar tres casillas y, presuntamente, muchos votantes de Vox dieron su apoyo a aspirantes populares. La transferencia de voto de Vox al PP se constata claramente cuando se analiza la brecha entre populares y socialistas en el Congreso de los Diputados y el Senado. Los socialistas ganan con mucha diferencia al PP en el voto a la Cámara baja. Sin embargo, esta distancia se reduce e incluso se elimina en el Senado.
En València, por ejemplo, el PP, con 306.041 papeletas, se quedó a 68.000 votos del PSPV. Sin embargo, el primer nombre de su lista de candidatos a la Cámara alta, el jurista Fernando de Rosa, obtuvo casi 80.000 más, 390.057 votos, tan solo 632 más que el socialista Javier de Lucas, el senador más votado en la Comunidad Valenciana. La elección del Senado, al tratarse de listas abiertas, ofrece resultados dispares. Sin embargo, el margen en el caso analizado es demasiado alto para pensar que es el factor personal el que ha atraído apoyos. En las circunscripciones de Castelló y Alicante se da la circunstancia de que tres de los cuatro aspirantes populares obtienen mejores resultados que los senadores socialistas electos. En Alicante, el PSPV obtuvo 32.545 apoyos más que el PP, pero el senador electo José Asensi - primero de la terna- obtuvo 242.498 votos mientras que su homólogo en el PP, Pablo Ruz, cosechó 260.730. Por su parte, la senadora electa Adela Pedrosa logra escaño y tendrá sueldo público con 245.903 papeletas frente a los 236.816 de su rival socialista Ana Martínez.
En Castellón, el PP, con 70.020 votos, se quedó a 13.887 sufragios del PSPV, pero la senadora más votada fue Salomé Pradas, con 88.171 papeletas. Por detrás de ella, figura el socialista Artemi Rallo y en tercer lugar, en el ranking de votos se encuentra el popular Vicente Martínez. En las tres provincias, hubo una disputa reñida por el segundo electo entre PP y PSPV. En València, Rubén Moreno arrebató el acta al PSOE por tan sólo 1.731 apoyos. En términos generales, los seis senadores electos del PP sumaron 1.436.122 votos, 13.231 más que los recibidos por los del PP.
