La primera variable y la más persistente. La dosis diaria del conflicto catalán que de forma inequívoca domina la agenda de los partidos políticos de cara al 10 de noviembre sin referencias a otros asuntos sobre la Comunidad o la provincia ofreció ayer un nuevo capítulo con varios frentes abiertos, de nuevo entre socios del Gobierno del Botànic como entre el Consell y los partidos de la oposición. Esta vez el detonante fue el mensaje lanzado por el diputado autonómico de Compromís por Alicante, Josep Nadal, que le recordó al presidente de la Generalitat, Ximo Puig que, aunque «no lo quiera, todos los pueblos tienen derecho a la autodeterminación, también el País Valencià». Esta afirmación colgada en su perfil de Twitter, venía acompañada de «puede que se debiera preocupar más por que su partido vaya a manifestaciones junto a Vox», en referencia a la presencia del PSC en la manifestación constitucionalista convocada en Barcelona por Societat Civil Catalana.
El «torpedo» lanzado por el diputado de Pego llegó como consecuencia de las declaraciones del presidente de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, en las que pedía a su homólogo catalán, Quim Torra, que «no nombre a la Comunitat» en todo lo relacionado con «sus ansias soberanistas». Puig no dejó escapar la ocasión de parar en corto a Torra, al suscribir el presidente de la Generalitat de Catalunya «de arriba a abajo» la declaración de la Llotja de Mar, que firmaron partidos independentistas catalanes, vascos, gallegos, valencianos y baleares a favor de su derecho a la autodeterminación como «una causa justa». Compromís no se adhirió al manifiesto. Esa voluntad de frenar a Torra, en días de gran convulsión por la crisis catalana, fue también ayer entendida de una manera cómplice por portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví. El diputado valenciano no tuvo reparos en poner paños calientes al jefe del Consell, al afirmar que «sobran» las declaraciones de «algunos políticos catalanes» sobre el derecho de autodeterminación de la Comunidad Valenciana y otras regiones.
Baldoví defendió que «cualquier pueblo tiene derecho a decidir su propio futuro, siempre dentro de los límites democráticos y pacíficos», pero trató de apartarse de las críticas vertida por el diputado alicantino Josep Nadal a Ximo Puig. Para Baldoví, estas palabras son de un integrante de la coalición que «expresa libremente sus opiniones», algo normal en el seno de Compromís donde hay «diversidad de opiniones». El mismo argumento que cuando hace unos días la vicepresidenta del Consell y coportavoz de Compromís, Mónica Oltra se desmarcó de la petición del Bloc -otra vez aparece el socio mayoritario de la coalición- de amnistía para líderes del «procés». Entonces, desde su faceta de integrante del otro sector mayoritario, Iniciativa, Oltra dijo que «esa no es la posición de Compromís», aunque horas después encendió otra mecha al pedir que se eliminara del Código Penal la sedición.
Y de nuevo, otro altercado para marcar la agenda diaria de la precampaña, con la condena del Tribunal Supremo marcando el paso de las distintas formaciones que luchan por escaños este 10-N. Y con la izquierda, sobre todo Compromís y Podemos, recordando que «le va bien a la derecha» que «se hable todos los días de Cataluña y Franco», lamentó Baldoví. El cruce de mensajes entre los socialistas y Compromís no podía pasar por alto para Ciudadanos.
Su portavoz en las Cortes, Toni Cantó, instó al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, a «dar ejemplo y cambiar de socios» ante el apoyo de miembros de Compromís al derecho a decidir. A Cantó le da igual que Puig diga que no secunda las peticiones de adhesión de Torra, puesto que el jefe del Consell «gobierna con los nacionalistas», por Compromís. De este modo, el líder de la formación naranja no se quedaba descolgado de la línea seguida por la presidenta del PP, Isabel Bonig, que no dudó en afirmar este fin de semana que «los que defienden el independentismo están aquí en la Comunidad y Ximo Puig gobierna con ellos».
En cualquier caso, Ciudadanos no paró ahí sus aportaciones al debate catalán en puertas de comenzar oficialmente una campaña electoral trascendental para desbloquear la parálisis política nacional. Sus dos últimas entregas vinieron de la mano de la eurodiputada de UPyD por Cs, Maite Pagaza, que ayer visitó Alicante para advertir sobre las consecuencias del «adoctrinamiento a los niños en las aulas», donde se «conculcan los derechos fundamentales» de menores, algo por lo que Cs piensa acudir al Defensor del pueblo para que «esto no ocurra ni en Barcelona ni en la Comunidad Valenciana». Y para hoy se espera la presencia del polémico eurodiputado catalán Luis Cañas, que hablará en Orihuela de regeneración democrática, nacionalismo y política lingüística. Más dosis de Cataluña. Aún más.
Convocatorias a menos de dos semanas de votar
Los partidos políticos intensifican su agenda en estos últimos cuatro días de precampaña oficial. El PSOE presentó su campaña en Ferraz, con asistencia de candidatos alicantinos al Congreso y al Senado. La eurodiputada de UPyD por Ciudadanos, Maite Pagaza, acudió ayer Alicante y Més Compromís presentó su programa electoral en su sede.
