Cuatro de los seis partidos que obtuvieron representación parlamentaria en las Cortes tras las elecciones del 28 de abril han cerrado con déficit el proceso, según se desprende del informe de la Sindicatura de Cuentas sobre los gastos electorales declarados por las formaciones políticas. En total, los partidos presentes en la cámara autonómica (PSPV, PP, Ciudadanos, Compromís, Vox y Unides Podem-Esquerra Unida) gastaron 2.708.696 euros en la preparación de esta cita, mientras que solo han recuperado 2.529.024 a través de las subvenciones.

El más afectado ha sido el PP. La formación que lidera Isabel Bonig fue quien más gastó en la preparación de los comicios (698.141 euros) mientras que sus resultados le depararon 595.076 en concepto de subvención, dejando 103.065 euros sin recuperar.

Compromís (39.416), Unides Podem-Esquerra Unida (26.724) y Ciudadanos (10.467), han invertido más dinero del que sus resultados electorales les permitirán recuperar a través del dinero público repartido por la Generalitat.

Solo PSPV y Vox han cuadrado sus cuentas y lo han hecho holgadamente. La subvención máxima a la que hubieran aspirado los socialistas tras su triunfo electoral asciende hasta casi 800.000 euros, sin embargo, el gasto recogido por la Sindicatura de Cuentas del PSOE es de 578.745 euros, que es lo que percibirán. Por parte del partido ultra, destaca el bajísimo gasto declarado para preparar esta cita electoral, apenas 29.166 euros. Con los resultados en la mano, Vox hubiera podido elevar ese gasto hasta los 322.549 euros. Cobrará 22.647, pues 6.519 fueron rechazados como gasto electoral.

El concepto de los gastos subvencionables es diverso: confección de sobres y papeletas y su envío postal, propaganda y publicidad exterior, anuncios en medios de comunicación, alquiler de locales, gasto en salarios no permanentes o transporte de candidatos y personal. Por su parte, el importe del dinero público percibido por los partidos se establece en función de sus resultados en las urnas. Así, la ley electoral valenciana fija en 13.387,25 euros por escaño y 0,67 euros por cada voto obtenido por cada formación que logre representación parlamentaria. En caso de que un grupo no obtenga diputado pero supere el 3% de los votos, se mantendrían los 67 céntimos por papeleta.