Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Carlos Mazón: «Traer Innovación a Alicante es un buen gesto del Consell»

Presidente de la Diputación de Alicante. Carlos Mazón (Alicante, 1974) es desde el pasado viernes el nuevo presidente de la Diputación de Alicante al frente de un gobierno que comparten el PP y Ciudadanos

Carlos Mazón, el pasado miércoles en Elche tras la firma del pacto de gobierno con Ciudadanos en el Museo de Pusol. Matías Segarra

P Retorna usted a la Diputación diez años después. Y nada menos que como presidente...

R No era el plan. Pero llegó una ocasión y cuando lo pensé, como realmente en mi vida nunca he hecho otra cosa que trabajar por mi provincia, me pareció muy coherente y, en base a eso, respondí que sí...

P ¿Y qué proyecto tiene Carlos Mazón para la Diputación?

R No es personalista. Alicante está en un momento en el que necesita coraje, valentía y cohesión. Y, por encima del proyecto común del PP y Ciudadanos, está lo que de verdad necesita esta provincia: agua, infraestructuras... Tenemos una provincia que cuando recibe un euro de inversión, devuelve diez a cualquiera que apueste por ella. Y luego en la Diputación no podemos predicar sólo con la palabra. No podemos pedir vertebración ni en la Comunidad ni en España sin practicarla primero en Alicante. Creo que se han dado buenos pasos pero podemos hacerlo aún mejor para cargarnos de razones. No podemos reivindicar cosas que luego ni siquiera hacemos aquí.

P ¿Le pide esas inversiones, supongo, a Madrid o a València?

R A los dos... He tenido el privilegio de participar en la elaboración de un estudio de la Cámara y la CEV sobre las inversiones estratégicas y mínimas para la provincia de Alicante entre los años 2020 y 2030. Muchas de ellas son proyectos ya redactados que están en cajones tanto del Gobierno como de la Generalitat. Ya lo escuchó en mi discurso de investidura que tengo la mano tendida. Pero hay proyectos que Alicante necesita y que son innegociables.

P Hace diez años, cuando usted estaba en la Diputación, el PP gobernaba con mayoría absoluta. Ahora necesitan a Ciudadanos

R De ninguna manera...

P Para empezar, la negociación con Ciudadanos ha sido plácida. Muchos de los que ahora están dirigiendo ese partido estaban con usted en su día en el PP...

R Me precio de fomentar siempre la participación política. Y quiero llevarme bien con todo el mundo. Estén en el partido que estén. Intento que haya buenas relaciones...

P Insisto. En Ciudadanos cohabitan ahora muchos de sus amigos...

R Claro que sí. Como tengo amigos socialistas, en Compromís...

P Pero nunca en este proceso negociador ha habido un riesgo real de que Ciudadanos acabara pactando con los socialistas...

R Efectivamente. No he percibido que hubiera ese riesgo. Por una razón mucho más importante que tener buenas relaciones con unos o con otros. La alternativa que tenía Ciudadanos era doble. O, como dice Toni Cantó, el PSC a la valenciana que pacta con los que pacta, que no asegura la unidad de España, que ataca la libertad educativa y que no es demasiado sospechoso de apoyar a Alicante; o el PP. Yo siempre he pensado, por principios de partido, que la unión natural era la que defiende a Alicante más allá de populismos y nacionalismos. En una provincia como Alicante, no hubiera contemplado otra alianza. Dicho esto, las negociaciones no han sido sencillas. Somos partidos distintos. Ha habido generosidad y esfuerzo.

P ¿Qué papel debe jugar Alicante en el proyecto autonómico?

R Hay dos ecuaciones. Y lo dije en mi discurso de investidura. Una: cuanto menos provincia de Alicante, más Generalitat. Y otra que piensa que cuanto más provincia de Alicante, más Comunidad Valenciana. Yo estoy en la segunda. Ciudadanos también. Y pienso que hay mucha gente que no es de Ciudadanos ni del PP que también lo cree. Me gustaría que hubiera espacios de encuentro. Pero estamos llegando a grados de polarización que hace muy difícil que podamos hablar con normalidad en política, lo que en una mesa entre amigos sí que se puede.

P ¿Sigue, por tanto, sin existir una vertebración territorial dentro de la Comunidad Valenciana?

R Sin duda. Pero yo también voy a entonar el «mea culpa». Creo que también tenemos mucho por hacer en la provincia. El PP y Ciudadanos han firmado su pacto en Elche. Y eso no es sólo una cuestión simbólica.

P ¿El problema que tiene el Consell con la provincia es el mismo que la Diputación tiene con Elche?

R Nadie puede predicar fuera de aquí, lo que no hace. Si tu no vertebras en la provincia, no puedes pedirlo en la Comunidad. Vuelvo a la ecuación: a más Elche, más provincia. Y si hay más provincia, hay más Comunidad con más fuerza para reivindicar. Y en ese punto voy a ser un socio mas que fiable de la Generalitat. Reivindicar en Madrid y, algo que se olvida, también en Bruselas.

P ¿No cree que se están poniendo bases de solución desde la Generalitat, por ejemplo, con la instalación por primera vez en la historia de una conselleria en Alicante?

R Sí. Es un buen gesto. Todo el mundo sabe que Elche tiene una capitalidad industrial, en Elda hay una del calzado, que Benidorm es capital turística... Pero más allá de cuestiones administrativas, financieras y políticas, nos falta por saber que apellido tiene la capitalidad de la ciudad de Alicante. Y cuando la Generalitat y el alcalde Luis Barcala dicen que Alicante puede tener un espacio en la tecnología, yo lo compro y lo veo. Tiene el mal precedente de la Agencia de la Innovación. Pero eso no significa que no estemos dispuestos a apoyar. Tenemos la obligación de que ese gesto salga bien. Más allá de los partidos, hay mucho empleo y desarrollo económico en todo eso.

P ¿Y cómo piensa destensar la relación de la Diputación con la Generalitat después de cuatro años de batalla con César Sánchez?

R Si el primer paso lo tengo que dar yo, estaré encantando. Pero siempre que sea para algo. Cuando uno se sienta a destensar, es conveniente que no haya lanzas, pistolas y metralletas apuntándole. Así es muy difícil. Si la Generalitat abre una nueva etapa en la aplicación de algunas leyes que arrancaron sin consenso, la Diputación está dispuesta a sentarse en esa mesa a hablar con la realidad que le pueda interesar a esta provincia.

P ¿De qué leyes habla?

R Hablo de la Ley de Mancomunidades, de la Ley de Servicios Sociales, de la actitud del conseller Marzà contra la libertad educativa... Estoy dispuesto a entender muchas cosas. Pero no estoy dispuesto a sentarme si hay cañones encima de la mesa.

P ¿Pide suspender dos leyes aprobadas por las Cortes y la destitución del conseller de Educación?

R Yo no pido la destitución de nadie. Estoy dispuesto a empezar de cero ese diálogo olvidando agravios. Pero tiene que ser sin la amenaza de la ejecución inmediata de esas leyes y para hablar de la realidad de la provincia.

P El presidente de la Generalitat, Ximo Puig

R Sí. Como todo. La Agencia de la Innovación fue un magnífico gesto que no sirvió de nada Yo también me fui a Elche a firmar el pacto y me tendré que someter a ese examen. Al Consell le pido que trate a Alicante como se merece. No es una posición ni de boina ni nacionalista. Pero la acumulación de agravios y de desigualdades entre provincias exige una reflexión. Cuando, en mi discurso, he dicho que esta mano es alicantina y valenciana pero es firme, también quiero decir que está tendida.

P ¿Va a frenar entonces la vía de la batalla judicial con el Consell?

R Creo que César Sánchez actuó magníficamente a la vez que intentaba mantener sin éxito líneas de contacto. No voy a hacer movimientos que perjudiquen a Alicante. Repito: si la Generalitat quiere hablar con vocación real y no dogmática de una serie de decretos o normativas, estoy dispuesto, pero todos desde cero. Con la amenaza va a ser muy difícil, por mucho gesto que hagamos, que lleguemos a algún sitio.

P Asunto concreto. ¿Van ustedes a entrar de forma definitiva en el Fondo de Cooperación Municipal?

R Ya entró la Diputación...

P No es cierto. Insisto: ¿Van a entrar en el Fondo de Cooperación?

R Lo hizo a través de los planes sostenibles. Cuando el planteamiento es de imposición, la respuesta nunca puede ser igual de leal. César Sánchez entró a regañadientes...

P Ha hablado antes de la libertad educativa. ¿Qué plantea usted en una provincia bilingüe para respetar los derechos de todos: de los castellanohablantes pero también de los valencianoparlantes?

R La realidad. La democracia y la libertad es más cara que la dictadura. Tiene un mayor coste. Pero tiene un retorno muy superior. Propongo que la gente pueda elegir. Y yo estoy dispuesto a poner de mi parte. Es verdad, insisto, que es más caro. No lo puedo negar. Pero también, por cierto, cuesta un poco más la imposición del valenciano en todos lados.

P Libertad de elección ¿Hay que garantizar que una persona que acuda a la administración y hable en valenciano se le atienda?

R Claro que sí. Pero no es lo mismo una persona que está en atención al público que en el departamento financiero. No tiene nada que ver. Pero cuando hablamos de Alicante, quizá, debemos adaptarnos a nuestros clientes. ¿Y si estamos perdiendo buenos profesionales que quieren saber aquí por no saber valenciano? Yo sé valenciano y mis hijos lo estudian. Pero es un debate estéril, especialmente aquí. En esta provincia hay conversaciones de personas que hablan en valenciano y su interlocutor le responde en castellano. Y no hay conflicto. No hay ningún problema en la calle con este asunto.

P Hablando de la Generalitat. El conseller Rafa Climent dijo que no le gustaría que el nuevo gerente de la Cámara de Comercio tuviera un perfil tan partidista como el suyo...

R No voy a entrar en una pugna personal. Pero quiero decir dos cosas. Una. Estoy encantado con el conseller Climent. Hemos trabajado conjuntamente. No creo que el director de la Cámara, siendo afiliado al PP, haya dejado de atender a un solo exportador, a un joven, a un emprendedor... Y segundo: quiero romper una lanza a favor de los afiliados de cualquier partido político. La falta de participación es muy peligrosa. No calificaré nunca la labor de alguien por el partido en el que milite.

P¿Cómo puede condicionar su estrategia de gobierno que la Diputación de Alicante vuelva a ser la principal institución en manos del PP en toda la Comunidad?

R De ninguna manera. No tengo prejuicios. Hace tiempo que pienso que las personas están por encima de ideologías. La Diputación tiene que hacer lo que interese en beneficio de la provincia. Estoy convencido que los socialistas y Compromís van a apoyar lo que sea bueno para Alicante por encima de sus propios partidos. Yo estoy dispuesto a hacerlo. Una de las primeras cosas que voy a hacer es abrir una ronda con todos los partidos para poder trabajar en acciones conjuntas. Políticas de consenso que nos harán más fuertes. En eso nos tendremos que esforzar todos y, desde luego, el PP también.

P¿Va a introducir elementos objetivos de reparto en las obras?

R Ya los hay. Otra cosa es que a algún partido político no le parezcan suficiente. Pero estoy dispuesto a estudiar mejoras en la objetividad del reparto. Por supuesto. Y yo quiero aportar algunos elementos de prioridad: municipios que bajen impuestos, que apuesten por empleo juvenil, que luchen contra la despoblación... ¿Podemos negociar eso? Hablaré con todos los alcaldes de los proyectos que pongan encima de la mesa sin mirar el color político.

P ¿Y el reparto de ayudas a dedo?

R Cuanto menos dedo en las obras mejor. Estoy dispuesto a sentarme para hablar de todos esos requisitos.

P ¿Tiene pensadas las competencias de su equipo de gobierno?

R Tengo una idea. Los cargos los hacen las personas y no al revés. Sí puedo adelantar que me reservo el Patronato de Turismo, que va a depender de Presidencia y que merece una consideración por su importancia en la actividad económica provincial.

P Sí habrá menos vicepresidencias. Hasta ahora había siete...

R Eso está pactado. Sólo dos y una de ellas para Ciudadanos.

P ¿Políticamente dentro del PP, su presidencia es volver al pasado?

R No he vuelto nunca al pasado...

P Lo digo por su etapa en la Diputación con Joaquín Ripoll...

R Sí, sí... Pablo Casado ha lanzado un mensaje claro y yo lo he entendido: volved a casa. Hay que sumar y os necesito a todos. A muchos más. Los que estáis, los que habéis estado, los que dudáis... Y yo me apunto a ese discurso. A nivel personal, tengo una segunda oportunidad en política. Ni es un modo de vida, ni quiero eternizarme. Vengo por un tiempo. Considero que merece la pena y luego volveré a mis ocupaciones anteriores.

P A usted no le gusta ahora la etiqueta de «ripollista». ¿Quién es para usted Joaquín Ripoll?

R No me gusta ninguna etiqueta. Yo soy del PP. Tuve una gran oportunidad muy joven con 23 años cuando Zaplana y Joaquín Ripoll, sin conocerme, vieron que podía tener cabida y recorrido en el PP. Siempre se lo agradeceré a los dos. Y nunca me ha dado la gana olvidarme de eso.

P ¿Y Eduardo Zaplana?

R Exactamente lo mismo...

P ¿Son sus padres políticos?

R No sería justo decir que han sido solamente ellos. Para decir la verdad debería incorporar al menos dos personas mas: Macarena Montesinos y Antonio Fernández Valenzuela. Hay mucha gente que me ayudó.

P Ahora ambos, Zaplana y Ripoll, están inmersos en dos gravísimas investigaciones por corrupción...

R Espero y deseo que todo salga bien.

P Hablando de corrupción. ¿Cómo va a funcionar ese observatorio de Transparencia que han pactado con Ciudadanos?

R Hoy a la persona que está en política se le presupone que va a sufrir un desprestigio. Y negarlo es del género tonto. Todos los pasos que demos para devolver a la gente la confianza en los políticos serán pocos. Con Ciudadanos hemos hablado mucho de este asunto. Nos parece muy bien que lo controlen ellos porque, entre otras cosas, somos nosotros los del PP, los que llevamos muchos años gobernando la Diputación y podría parecer, si lo dirigiéramos, que tenemos algo que ocultar

P ¿Es entonces un lavado de cara?

R No. Es una realidad para que nadie lo pueda poner en duda.

P Ayer ya inauguró su agenda visitando la zona afectada por el último incendio en Beneixama con toda la oposición. ¿Cuando llegue mañana al despacho, cuál es la primera medida que piensa tomar?

R Hay que hablar de la tasa turística, el observatorio de transparencia, reactivar las agencias comarcales, la reivindicación urgente del plan de infraestructuras elaborado por la Cámara de Comercio y la CEV, crear una unidad para conseguir fondos europeos. A Alicante no se le defiende poniendo cañones en Dénia y esperando para devolver el envite. A la provincia se le defiende reivindicando en València, Madrid y Bruselas.

«Es importante que el PP y la Diputación vuelven a estar unidos tras ocho años»

«¿Bonig como candidata al Consell en 2023? Le veo con muchas ganas de seguir trabajando por el partido»

P ¿Va a unir la presidencia de la Diputación con la del PP?

R Ya lo está... Eduardo Dolón está al frente del partido y, después de ocho años, el presidente del PP también ocupa a la vez un lugar de relevancia en la Diputación.

P Le pregunto de otra manera. ¿Va a aspirar usted a la presidencia provincial del PP?

R Le cuento un secreto. Yo no soy un político que esté pensando en el siguiente cargo que va a tener. Soy concejal en Alicante y presidente de la Diputación... ¿Usted cree que yo tengo alguna aspiración más?

P Históricamente, salvo en esta última etapa, la presidencia provincial del PP ha ido unida al liderazgo en la Diputación...

R Primero Tibi, luego Ibi y después llegaremos a Onil. Lo importante es que el partido y la Diputación van a estar más unidos que en los últimos ocho años. Y eso es un punto de partida muy interesante. Cuando se convoquen los congresos...

P ¿... aspirará a la presidencia provincial del PP?

R No me lo he planteado...

P ¿Hacia dónde debe caminar el PP en la provincia de Alicante y en la Comunidad Valenciana?

R Nuestro objetivo debe ser, sin duda, recuperar la Generalitat.

P ¿Va a ser muy complicado darle la vuelta a unos resultados electorales que han sido malos?

R Los resultados no han sido buenos. En España han sido peores de los esperados. Pero creo que se abre una etapa interesante de recuperación para ensanchar el partido. Y en la Comunidad Valenciana, no tengo demasiadas dudas de que en 2023 habrá un presidente de la Generalitat del Partido Popular.

P Ahora el PP ha perdido doce diputados en las Cortes Valencianas a pesar de su ataque frontal contra la gestión de la izquierda...

R La etapa de las mayorías absolutas sigue sin gozar de buena salud. No digo que se pueda recuperar. Pero, a día de hoy, lo que veo es una tendencia con un PP al alza. Y voy a hacer lo posible, cuatro años es un mundo, para que lleguemos con opciones de gobierno. Con una mayoría o con una coalición.

P ¿Tienen «agujeros» como, por ejemplo, en Orihuela?

R Con el proyecto de Emilio Bascuñana, estoy convencido que recuperaremos la mayoría absoluta en Orihuela en cuatro años.

P ¿Y ve usted a Isabel Bonig

R Veo a Isabel Bonig con muchísimas ganas de continuar trabajando por el Partido Popular...

P Ya sabe que su opinión sobre el futuro liderazgo de Isabel Bonig dentro del Partido Popular será a partir de ahora determinante...

R Hay que reconocerle a Isabel Bonig el relato de asumir el PP de la Comunidad Valenciana en el peor momento de los últimos 30 años. Dicho esto: No hemos llegado al punto de dar ninguna opinión.

P ¿Debe abordar una remodelación de la ejecutiva regional del PP y, quizá, relevar a Eva Ortiz?

R No me corresponde...

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats