La nueva Conselleria de Innovación, Universidades y Sociedad Digital ha iniciado su andadura en Alicante. Todas las miradas de la Comunidad estaban puestas ayer en la ciudad, exactamente en la Casa de las Brujas, donde el traspaso de competencias a la nueva consellera Carolina Pascual Villalobos se vivió con una expectación inusitada. La ocasión lo merecía: por primera vez en la historia un departamento autonómico abría su sede en la capital alicantina. Sin duda, un hito histórico para la provincia. Este guiño que el Consell ha tenido con el sur de la Comunidad abre una oportunidad para ganar una mayor visibilidad y plasmar en la práctica la bicapitalidad que defiende el presidente Ximo Puig. Y precisamente por su significado, el intercambio de la cartera acaparó más atención de lo habitual.
Pasadas las doce de la mañana llegaba a la Casa de las Brujas Ximo Puig, minutos antes que la vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra. Se les veía especialmente ilusionados, además de por el peso del triunfo tras haber conseguido un acuerdo para formar el Botànic II, por tratar de evidenciar que comenzaba una nueva etapa para intentar dejar atrás la discriminación que ha sufrido la provincia por parte del Gobierno del Estado en los presupuestos generales y por la carencia histórica de inversiones de la administración autonómica. Y ese es precisamente uno de los reproches que los ciudadanos alicantinos atribuyen a estas cuatro décadas de autogobierno. La necesidad de impulsar una posición alicantina reivindicativa ha sido uno de los motivos que ha provocado una desafección de la provincia con València y que, de hecho, ha restado peso a la izquierda en las elecciones autonómicas y municipales en esta circunscripción.
En su empeño por enmendar los errores, ya sean de percepción o de gestión, Puig presidió el acto institucional en las instalaciones de la Avenida Doctor Gadea, en el edificio histórico más emblemático que el Consell tiene en Alicante y que adquirió para restaurarlo. No obstante, y pese a su intención de ubicar el nuevo departamento en este emplazamiento, la falta de espacio ha obligado a la Generalitat a valorar como primera opción provisional la oficina Prop, situada en la Rambla, donde hasta ahora se ubica una desangelada y fallida Agencia Valenciana de la Innovación (AVI) y en la que se llevan a cabo la mayoría de trámites administrativos. Este gesto a la provincia se enmarca en la convicción del nuevo ejecutivo autonómico de vertebrar el territorio, más allá de firmas y meros actos institucionales. A partir de ahora, la economía digital tiene en la provincia su nuevo motor y aterriza de manera decisiva en la sociedad de la innovación.
Alicante tiene un «papel decisivo» en el futuro de la Comunidad Valenciana. Así defendía ayer el jefe del Consell la decisión de fijar su mirada en la ciudad, tras presidir el traspaso de competencias a la nueva consellera, la ilicitana Carolina Pascual Villalobos, de manos del hasta ahora conseller del ramo, Vicent Marzà, que en esta nueva legislatura deja de estar al frente de Universidades para centrarse en las áreas de Educación, Cultura y Deporte. La vicepresidenta Mónica Oltra actuó como maestra de ceremonias en un acto que contó con la presencia del conseller Arcadi España, la subdelegada del Gobierno Araceli Poblador, los alcaldes de Alicante, Luis Barcala; Elche, Carlos González, y Alcoy, Toni Francés, además de diputados, secretarios autonómicos, alcaldes y numerosas personalidades del mundo de la educación y la universidad de la provincia. Mónica Oltra quiso dejar claro que la cartera que hace cuatro años asumió Marzà era una simple «carpeta vacía» pero aseguró que ahora se traspasa llena de trabajo, de responsabilidades y también del código ético de transparencia y «del buen gobernante» para que la nueva consellera no pierda de vista la importancia de que los ciudadanos confíen en las instituciones. El acto, breve y sencillo, desbordó todas las previsiones de asistencia en la Casa de las Brujas e, incluso, se tuvo que instalar una pantalla en el hall para poder seguir la convocatoria de la Generalitat.
La noticia ha sido bien recibida por todos los partidos políticos. Incluso, por la oposición al Consell. El alcalde de Alicante, Luis Barcala, destacó que la Generalitat ha «pasado de las palabras a los hechos» y confió en que «a todos los niveles y de forma operativa» funcione desde Alicante, pues considera que el contenido «encaja perfectamente» en el proyecto que impulsa «Alicante Futura» sobre la industria tecnológica. El primer edil se comprometió a reunirse con el presidente tras las Hogueras aunque ayer ya compartió conversación en el acto tanto con el presidente de la Generalitat como con la vicepresidenta Mónica Oltra. El síndic de Ciudadanos en las Cortes, Toni Cantó, por su parte, consideró que la provincia tiene razón cuando se queja acerca de cómo esta siendo tratada, y mostró su deseo de que la Conselleria «tenga más contenido real que solo el nominal de llevar a cabo ese traslado».
«Es mucho más que un gesto. La innovación es una necesidad»
La nueva consellera expresa su compromiso con el «impulso de la nueva economía» y dice que desembocará en mejores trabajos
Ayer fue un día grande para Alicante por tener por primera vez la sede de una conselleria y por iniciar el camino para configurarse como la capital de la innovación. Así se expresó ayer la consellera Carolina Pascual, quien destacó la importancia que tiene la decisión del Consell de ubicar en la ciudad este departamento: «Es mucho más que un gesto». La nueva titular del área considera que se ha iniciado una gran oportunidad para «ganar visibilidad».
La ingeniera recibió la cartera de manos del conseller de Educación, Vicent Marzà, y expresó su compromiso con «el impulso de la nueva economía» que se plasma en proyectos como el Distrito Digital, del que sostuvo que tendrá en la provincia su principal motor. También instó a las instituciones y administraciones a recorrer juntos este gran reto que hay por delante y dijo que «la innovación no es una alternativa, es una necesidad». La ingeniera prosiguió que este nuevo departamento inicia su camino «en consonancia con los tiempos que vivimos» para acompañar al sistema productivo y crear más empleo.
La nueva miembro del gobierno terminó su discurso reconociendo que es «feliz por ser parte de este proyecto». También el conseller Vicent Marzà, de Compromís, quiso dar las gracias por estos cuatro años de gobierno y destacó la necesidad de que la Comunidad se convierta en un referente de innovación y digitalización.
