Vicent Cucarella no había estado nunca en la ciudad de Alicante, hasta esta semana que la Sindicatura de Comptes ha sido la anfitriona de la reunión organizada por el Tribunal de Cuentas con los organismos de control externo de doce comunidades autónomas. Hablar con el Síndic Major permite recorrer el vasto camino que hay desde la infrafinanciación de la Comunidad hasta el cambio climático.
P Hace tres años llegó a la Sindicatura denunciando la «discriminación» que sufrimos los valencianos en el reparto del dinero del Estado. ¿Seguimos igual?
R Sí, desafortunadamente seguimos igual y pensaba que en estos tres años lo íbamos a solucionar. Hay mucha unanimidad en reconocer que el «caso valenciano» es muy atípico. Ningún esperto en financiación lo niega. ¿Qué pasa? Si no se pone más dinero encima de la mesa, si se reparte igual lo que hay con un criterio diferente, que unos ganen y otros pierdan, eso para las negociaciones. La solución es poner más dinero porque hay una falta de equidad horizontal, entre comunidades autónomas, y de equidad vertical, desde el Estado hasta las comunidades. Si tenemos en cuenta la cantidad y calidad de los servicios públicos que prestan las comunidades autónomas, que sin al esencia del Estado de Bienestar todo ese debería tener una prioridad en el reparto de ingresos que hoy en día no tiene.
P Si hace años la deuda valenciana era «histórica», ¿ahora cómo la calificaría?
R Todo lo que año a año no nos llega, unos 1.100 millones al año, si lo acumulas desde el 2002, llevamos unos 20.000 millones de deuda que no es por mala gestión. Sencillamente tenemos menos dinero por una deuda que no es nuestra, es de todo el conjunto del Estado.
P Usted criticó el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) porque eliminaba la autonomía económica del Fondo de Liquidez AutonómicoConsell
R El FLA es un mal menor que fue la salvación, aunque el dinero nos llegó como préstamo y eso no es justo cuando lo que queremos es que nos mejoren la financiación. Sirve para salir del paso.
P ¿Hasta cuando piensa que seguiremos soportando esa atadura económica, esa sumisión?
R Lo primero es razonar bien la infrafinanciación, y esa parte la hemos hecho bien. Y lo segundo es presionar. Los valencianos no hemos tenido ningún poder político para presionar. Esa es la clave. Se han hecho manifestaciones pero no se puede decir que hemos sido muy contundentes.
P Después de las elecciones, seguirán al frente de los gobiernos de Madrid y València, Pedro Sánchez y Ximo Puig
R No sé yo qué color político es el más adecuado para solucionar esto. Los valencianos hemos tenido de todo, con gobiernos diferentes se presionaba con fuerza desde València y no te hacían caso porque eran diferentes en Madrid, y del mismo color te decía «no me crees problemas ahora». Lo que no se puede es volver a discriminar a los valencianos.
P El primer objetivo del Plan Estratégico 2019-2022 de la Sindicatura de Comptes es ayudar a mejorar el sector público valenciano. ¿Cómo lo piensan hacer? ¿Con más auditorías?
R Es el objetivo principal. Hay más concienciación, más controles informáticos que no permiten escaparse tanto. Una forma son las auditorías operativas que estudian la economía de la gestión del dinero, con informes muy jugosos. Yo considero que la sociedad está llegando a unos límites, tendremos problemas de crecimiento, incluidos los servicios públicos y tendremos que priorizar.
P Ya no saltan casos de corrupción como hace unos años. ¿Pero no hay que fiarse?
R No hay que bajar la guardia. La sociedad comienza a penalizar un poco, el gestor también es más prudente, cuando antes había más manga ancha, y ahora hay más plataformas de control.
P Durante la campaña, hubo partidos a favor de eliminar la Agencia Antifraude y la Conselleria de Transparencia
R Estas instituciones nunca están de sobra, lo que hay que hacer es coordinarse bien y no solaparnos. Pero por ahora, en la Comunidad Valenciana no hay ningún roce.
P ¿Hay más conflicto cuando se habla de centralismo frente a cesión de competencias?
R Hay que ver a quien le corresponde prestar un servicio más cercano a la ciudadanía. Y ver en cada caso si hay duplicidad. Estamos errando la crítica, porque la que tendría que desaparecer en ocasiones es la administración central.
P ¿Cambiaría todas estas medidas por una mayor concienciación frente al cambio climático
R El cambio climático es la consecuencia de exigirle al planeta más de lo que es capaz de aguantar. Estamos ligados a un ciclo vicioso, necesitas crecer para pagar deudas y para crecer te endeudas más. Y no solo hay que hacer una transición energética, hay que hacer una transición social. El futuro es la energía renovable siempre que se reduzca el consumo actual. El cambio climático no es tener coche eléctrico.
P ¿Por qué propone que vayamos hacia el «decrecimiento»?
R Tenemos que frenar la economía. Si tengo hambre no me como 10 bocatas porque me sientan mal. No hay que crecer por creer y no todos tenemos que tener de todo.
