Las palabras pronunciadas por el expresidente del Gobierno José María Aznar en el acto en València donde fue a apoyar a la candidata del PP a la Generalitat, Isabel Bonig, no han dejado indiferentes ni al presidente de la Generalitat Ximo Puig, ni a la vicepresidenta Mónica Oltra. Asegurar que la Comunidad Valenciana se juega «ser un barrio secundario del nacionalismo catalán», como señaló Aznar, provocó ayer la respuesta contundente de Ximo Puig, al asegurar que «lo que no es la Comunidad es Barrio Sésamo», por lo que el candidato del PSPV a revalidar el cargo le reclamó a que «no venga a insultar la inteligencia de los valencianos, aquí todo el mundo es bienvenido, pero por favor que no nos falten al respeto».

Así se pronunció Puig en declaraciones a los medios al ser preguntado por las afirmaciones declaraciones del expresidente del Gobierno en el mitin celebrado en València, en el que también instó a los valencianos a «decir no a más manipulaciones ni culturales, ni lingüísticas, ni educativas, ni históricas». Aznar hizo el miércoles en La Petxina un llamamiento a concentrar el voto del centro derecha en el PP «desde mi autoridad moral, mi historia, la que se me reconozca, desde mis años y mi experiencia como presidente», palabras pronunciadas en presencia de la candidata del PP a la Generalitat, Isabel Bonig; y del cabeza de lista de los populares al Congreso por Alicante, César Sánchez, entre otros.

Para Ximo Puig, «el señor Aznar siempre se retrata en su mejor versión, él es así, lo que es evidente es que la Comunidad Valenciana, afortunadamente, quiere olvidar para siempre lo que significó el aznarismo y el PP de la Comunidad Valenciana», señaló. Por contra, el presidente del Consell indicó que José María Aznar «tenía una nueva oportunidad para pedir perdón a los valencianos por Gürtel, por toda la corrupción que él en gran medida propició y protagonizó».

Despierta poco interés

Con más displicencia se mostro ayer la candidata de Compromís a la presidencia de la Generalitat, Mónica Oltra, respecto a las frases de José María Aznar, un expresidente del Gobierno que representa «una radicalización y una manera de entender la derecha desde un extremo». En cambio, a Oltra le interesan «poco» sus aportaciones al debate público.

Al ser preguntada por las manifestaciones que Aznar hizo el miércoles, Oltra afirmó que el expresidente ya «dio de sí lo que dio de sí» cuando presidía el Gobierno y no representa una política basada en poner en el centro a las personas ni que genera felicidad facilitando la vida. Aznar «no habla de estas cosas», añadió la vicepresidenta Oltra.

En el polo opuesto de la doctrina inspirada por Aznar, según Mónica Oltra, se sitúa Compromís, que está «combinando» la labor de gobierno, para «seguir mejorando la vida de la gente», con esa precampaña para «cornear el mayor apoyo posible para que las políticas que llevadas a cabo estos cuatro años tengan continuidad», insistió Mónica Oltra.