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Císcar descarta irse a Madrid y quiere repetir como número uno a las Cortes en Alicante

El líder de los populares de la provincia tiene intención de volver a encabezar la lista autonómica y no desea una salida en el Congreso

El presidente provincial del PP, José Císcar, junto a Isabel Bonig en Alicante hace unas semanas. pilar cortés

José Císcar, presidente provincial del PP, tiene claro el futuro político que desea para las próximas elecciones autonómicas: encabezar de nuevo la candidatura de los populares a las Cortes Valencianas. El dirigente alicantino descarta por completo marcharse a Madrid para ocupar un escaño en el Congreso, como planteaban una serie de cargos del partido para concederle una salida política, y tiene intención de volver a la escena autonómica, en la que gobierne o no Isabel Bonig, se va a jugar el futuro del PP: de nuevo al frente de la Generalitat o en una guerra abierta por la sucesión en el supuesto de que los comicios se salden con derrota. Los movimientos de las candidaturas se tendrán que acelerar en los próximos días una vez que el jefe del Consell, Ximo Puig, ya ha firmado el decreto con el adelanto electoral que unirá las autonómicas con las generales en unos comicios a celebrar el próximo 28 de abril.

El movimiento del presidente de la Generalitat ha cogido a los populares con el pie cambiado. Necesitan resolver las candidaturas a principios de la próxima semana toda vez que posteriormente son Fallas en València y, una vez finalicen las fiestas josefinas, de inmediato la Junta Electoral abrirá el plazo para registrar las candidaturas entre los días 20 y 25 de marzo. Es posible que este fin de semana se puedan resolver gran parte de las incógnitas. Al menos, los cabezas de lista. Pablo Casado, presidente nacional del PP, está de ruta por la Comunidad Valenciana con actos en Castellón, Elche y muy probablemente el domingo en la ciudad de Alicante, aunque no está aún confirmado. El próximo martes estará en Mutxamel el secretario general del PP, Teodoro García Egea, el hombre encargado de las candidaturas que ha resuelto el conflicto abierto de Orihuela con la imposición de Emilio Bascuñana.

Pero, sea como fuere, Císcar quiere volver a ser el número uno del PP en la provincia de Alicante a pesar de la contestación de su liderazgo entre los afines a Casado. La cúpula regional reivindica el papel de la mayoría del actual grupo parlamentario para que continúe, reclama que Bonig como candidatura a la Generalitat y la persona que se juega su carrera política en este envite tenga poder a la hora de ordenar las listas y además entiende que César Sánchez -en un escenario de un grupo parlamentario mucho más reducido que el actual- debe concentrarse en la batalla de la Diputación, un puesto al que intentará optar a través de la lista municipal de Alicante. Habrá que esperar porque, en cualquier caso, los «casadistas», con toda seguridad, querrán colocar su sello también en las candidaturas autonómicas. La dirección regional del PP considera que el líder nacional tiene que centrarse en las candidaturas para Madrid y dejar a Bonig el margen suficiente en la Comunidad. Fuentes del partido subrayaron que, si Císcar quiere encabezar, no ven motivo para que el presidente del PP deje vía libre. Para la lista al Congreso de los Diputados, en principio, Génova sigue buscando un independiente pero ahora ha surgido, además, la opción de Carlos Castillo, vicepresidente de la Diputación, que sigue sin acomodarse en las listas.

Para Bonig , una vez consumado el adelanto, el PP de la Comunidad «está preparado» toda vez que ya que «era una posibilidad que contemplábamos» y el bloque de derecha «está muy movilizado». «Tenemos estructura en cada municipio y sabemos que es un puente festivo importante pero vamos a trabajar mucho en ese tema y que todo el mundo vote esos días», señaló la número uno regional del PP que confía en ser la más votada de entre las fuerzas conservadoras para gobernar.

Cada uno debe estar en su propia candidatura

La idea de la cúpula popular es que las candidaturas se ordenen en función del cargo al que opte cada uno y sin duplicidades. No quiere la dirección del PP que el grupo en las Cortes se pueble de alcaldes ni de cargos locales que, como apuntaron las fuentes consultadas, deben centrarse en sus consistorios. Será un mandato muy complicado en el que la derecha recuperará gobiernos a tres bandas pero con pocos efectivos en cada grupo y eso dificultará doblar.

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