El exsecretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro, y la exconcejal alicantina del PSPV-PSOE Carmen Sánchez Brufal han creado nuevo lobby ecologista denominado 'Democràcia en verd'.

El objetivo de este grupo de presión, creado formalmente como asociación justo a las puertas de las elecciones, es influir en los programas electorales de la izquierda.

La asamblea fundacional se celebró el pasado 8 de febrero con la participación de medio centenar de personas de movimientos sociales y ecologistas de toda la Comunitat, y se ha inscrito esta misma semana en el Registro de la Conselleria de Justicia de la Generalitat.

Julià Álvaro ha mantenido reuniones discretas con todas estas personas en Alicante, Castellón y Valencia y, tras obtener su respaldo, ha dado a conocer el proyecto, que tiene como fin que la política "integre en sus prioridades la dimensión ambiental al mismo nivel de importancia que los problemas sociales, económicos y de regeneración democrática", según miembros de la entidad.

Los miembros que vienen de partidos políticos como Compromís -como es el caso de Cristina Domingo- o de asociaciones alicantinas como Gran Vía Sur -como Pepe Santamaría o Sol Garín- se han inscrito a título personal.

"Hemos creado esta red de redes porque la dimensión ambiental es una prioridad social y las políticas ambientales no pueden ni deben ser relegadas, ni intercambiadas por otras consideradas más prioritarias", según fuentes de 'Democràcia en verd'.

En este lobby se integran personas de diferentes procedencias "convencidas de que la lucha merece la pena y que hay otras formas de actuar", señalan desde la asociación, cuya función es la práctica es funcionar como grupo de presión.

Julià Álvaro fue cesado al frente de la secretaría autonómica de Medio Ambiente por su polémica gestión en el sistema SDDR de la gestión de residuos. Después de su sustitución, achacó su cese a los movimientos empresariales.