Ocho años después, la reforma del Estatuto realizada para blindar las inversiones del Estado en la Comunidad Valenciana ya es un hecho. Falta el trámite de su regreso a las Cortes (la semana próxima), ya que se ha modificado el texto, y la publicación oficial, pero aunque Pedro Sánchez o Ximo Puig disolvieran hoy parlamentos no tendría que volver a la casilla de salida, después de que el Senado la aprobara ayer en su último pleno de la legislatura sin votos en contra.
El nuevo Estatuto regresa a las Corts distinto a cómo salió en 2011. Al final no se ha agregado una disposición adicional, sino que se ha añadido un apartado al artículo 52, incluido en el capítulo de competencias de la Generalitat, por el que «participará en las decisiones sobre la inversión del Estado en la Comunidad Valenciana». Esta «será equivalente al peso de la población» de la autonomía sobre el conjunto del Estado. El nuevo texto incluye además que «con esta finalidad» se constiturá una comisión integrada por la administración estatal, autonómica y local.
Puig, que acudió ayer al Senado, destacó el valor del acuerdo de los partidos valencianos en contraposición al «fanatismo» y la «crispación» de la política española. Y subrayó lo que supone la reforma para el avance del modelo autonómico y «federalizante». «Un paso adelante en cogestión frente a intentos recentralizadores y rupturistas», afirmó.
Sobre la aprobación casi unánime, el presidente Puig apuntó que «el oasis valenciano ha llegado a Madrid». De los 241 senadores presentes ayer tarde, 236 votaron a favor, cuatro se abstuvieron (de Ciudadanos) y uno no votó (el reciente de Vox por Andalucía, según parlamentarios presentes). «Se ha superado la confrontación: la vía valenciana se ha demostrado con el Estatuto», señaló Puig a su regreso a la ciudad de València.
El expresidente y ahora senador Alberto Fabra recordó al imputado Francisco Camps por «iniciar el camino» de la reforma, según recogió Efe. En esa línea, la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, destacó que la reforma la impulsó el PP con unanimidad en las Cortes y calificó de «grave error» la decisión de Cs. Los de Albert Rivera, que ya se abstuvieron en comisión aunque en las Cortes habían expresado anteriormente su apoyo al texto, argumentan que «no servirá para nada» ni «llevará un euro» y que se trata de un proyecto «inaplicable» en función de los fallos del Tribunal Constitucional contra disposiciones similares incluidas en los estatutos de Cataluña o Andalucía.
No obstante, una sentencia del Supremo, como publicó este diario, sí que avala estos blindajes estatutarios de las inversiones cuando pasan por comisiones bilaterales.
La ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, tomó la palabra para felicitarse por el acuerdo y aseguró que hoy (por ayer) «se fortalece y actualiza» el Estatuto y el sistema constitucional.
2.500 millones perdidos
Puig remarcó que «en el futuro, gobierne quien gobierne tendrá que tener en cuenta a la Comunidad Valenciana en inversiones». «Mejorará el empleo y las posibilidades de un proyecto potente para la Comunidad Valenciana», añadió.
Para el jefe del Consell, los gobiernos que vengan tendrán que respetar el nuevo Estatuto y el blindaje de las inversiones. «Si no -advirtió- se genera una fractura y una desigualdad a los valencianos no admisible».
«Un buen día», subrayó Puig, que echó mano de calculadora para denunciar que la falta de equivalencia con la población ha provocado en los últimos 5 años «la disminución de inversiones de más de 2.500 millones».
Carles Mulet (Compromís) se lamentó de que «un territorio con cinco millones de habitantes» haya recibido financiación «como si fuéramos cuatro».
