El expresidente de la Generalitat y exministro de Trabajo Eduardo Zaplana permanecerá ingresado en el Hospital La Fe de València, según informaron do a EFE fuentes del equipo médico que le atiende. Zaplana no fue visitado ayer por los especialistas que tratan los problemas derivados de la leucemia que sufre y por la que fue trasplantado, aunque las mismas fuentes confirman que tiene pendiente la realización de pruebas médicas por lo su estancia se prolongará.

Al respecto, la titular del Juzgado de Instrucción 8 recuerda en el auto dictado ayer que «nunca se ha impedido ningún tipo de tratamiento o cuidado» al expresidente de la Generalitat. Y añade que «toda la población que se encuentra en Picassent [en referencia al centro penitenciario] tiene los mismos derechos y, si en lugar de al pabellón de judiciales en el Hospital General, se decide por los médicos que se encuentre en La Fe, nada tiene que objetarse, pues toda persona tiene derecho a ser atendido donde se le pueda dar mejor atención (...) Y a los médicos corresponde decidir dónde debe quedarse como, supongo, se decidirá sobre cualquier preso preventivo o penado que se encuentre en el referido centro», concluye la magistrada, que zanja así la polémica que la ha rodeado en los últimos meses por su negativa a excarcelar a Eduardo Zaplana. También añade la magistrada que no depende de ella «el régimen de visitas que ni lo establece, ni lo acuerda, ni lo restringe esta instructora». Al tiempo que recordaba que la habitación donde estaba Zaplana cuando estaba en prisión preventiva era «una extensión del Centro Penitenciario de Picassent y sujeta a lo establecido por dicho centro en base a la legislación penitenciaria» (en referencia a la polémica porque el cardenal Cañizares no pudo visitarlo).

Por otra parte, los dos presuntos testaferros del expresidente de la Generalitat, el abogado Francisco Grau y el exdirectivo de Terra Mítica Joaquín Barceló, sí salieron de la cárcel. El primeto del centro penitenciario de Fontcalent, en Alicante, donde fue su abogada quien le recogió. Y el segundo de la prisión valenciana de Picassent para retornar después a Benidorm.