La dirección de Compromís ya ha puesto en marcha unas primarias con «overbooking» de aspirantes a las listas autonómicas y de los municipios más importantes, entre ellos Alicante y Elche además de la ciudad de València. Un proceso interno que, además, tiene el objetivo de medir el músculo de su capacidad de movilización de cara a unos comicios que están a cuatro meses vista y que, al menos sobre el papel, se decantarán con una diferencia mínima entre el bloque de derecha y de izquierda que aspira a otro mandato en el Consell. A diferencia de lo ocurrido en 2015 y en otros procesos cuando el reglamento generó interminables reuniones con alta tensión, el documento ya llegó pactado a la reunión de la ejecutiva que lo validó por unanimidad y que abrió un proceso que culminará con la votación del 9 de marzo.

La normativa interna es muy similar a la de hace cuatro años. Habrá tres votaciones para elegir candidaturas municipales, el orden de todas las listas autonómicas y aspirantes a las europeas, tercera urna que se abrirá el 25 de mayo en la que Compromís aspira a revalidar un escaño en Bruselas al que volverá a optar Jordi Sebastià. En esa votación interna -por vía telemática o presencial en los diferentes colectivos locales- tienen derecho a participar los militantes de las cuatro marcas que conforman a día de hoy la coalición de izquierdas -Bloc, Iniciativa, Els Verds e independientes- además de los afiliados a partidos municipales adheridos y todos los simpatizantes mayores de 16 años que se inscriban en el censo habilitado para este proceso. Habrá una doble reserva de paridad y pluralidad para que todas las fuerzas de Compromís tengan representación en las primeras posiciones de cada lista.

En un comunicado, la dirección de la coalición aseguró que «seremos los únicos que celebraremos primarias abiertas para ordenar las listas completas». Esta propuesta de reglamento, apuntaron, ha sido fruto de un proceso de «diálogo y entendimiento» para conseguir un documento que «abra de nuevo un proceso de primarias participativo y radicalmente democrático». Fuentes de Compromís apuntaron que la aprobación de esta normativa sin las tensiones de hace cuatro años evidencia la «estabilidad» de la coalición y el «éxito» a la hora de manejar su pluralidad interna. El proceso tiene un primer objetivo: lanzar la campaña electoral y movilizar a las bases después de cuatro años en los que Compromís se ha centrado en la acción de gobierno. Confían en una participación superior a las 20.000 personas que se apuntaron a la votación hace cuatro años y del millar que estaba en el censo de la ciudad de Alicante. Dentro justo de una semana se reunirán los máximos órganos ejecutivos de todos los partidos socios para validar el reglamento de primarias y el sábado 9 de febrero habrá una «trobada» -así se ha bautizado- en la que todos los notables de la coalición marcarán el inicio de ese proceso interno.

La pugna arranca con una decisión en medio de un «overbooking» de aspirantes. Todas las encuestas conceden a Compromís la consolidación de un espacio político con un resultado ni muy superior al de 2015 ni que tampoco va demasiado a la baja. En principio, dejando claro que Mónica Oltra será la candidata al Consell sin ningún tipo de discusión, esta votación puede venir marcada por el relevo generacional y por la ruptura de los bloques de partidos. En València, detrás de Oltra, por ejemplo, los participantes deberán avalar si certifican un nuevo liderazgo con Fran Ferri, síndic parlamentario, como número dos y dónde ubican a una figura emblemática como la de Enric Morera, presidente de las Cortes. El conseller Vicent Marzà se perfila, casi seguro, como número uno por Castellón.

En la provincia hace cuatro años salieron elegidos cinco diputados. A falta del anuncio de Mireia Mollá sobre su futuro, los otros cuatro parlamentarios quieren continuar: el conseller Rafa Climent; Josep Nadal, el conocido cantante de «La Gossa Sorda»; Marian Campello, que cambia de cuota al afiliarse al Bloc; y la ecologista Cristina Rodríguez. A ello se suman altos cargos como Aitana Mas, que «suena» incluso para encabezar y pulsos comarcales que acumulan por ahora, como en el caso de l'Alacantí, hasta tres aspirantes: Cintia Alavés, Alicia Climent y el veterano Toni Arques. En la ciudad de Alicante, con Natxo Bellido como número uno, la gran duda es la continuidad de la edil María José Espuch. Todos a jugar.