Después del conflicto abierto en la ciudad de Alicante con los movimientos internos para relevar a la concejala María José Espuch del grupo municipal, Compromís se mete ahora en otro charco que afecta a uno de sus pesos pesados y que tendrá impacto en todo el trámite para elegir las listas autonómicas en un proceso de primarias que, salvo sorpresa, se convocará la próxima semana. Enric Morera, presidente de las Cortes Valencianas y nada menos que la segunda autoridad de la Comunidad, anunció ayer por sorpresa que se presentará a esa votación interna para elegir a los candidatos autonómicos en medio de una intensa batalla generacional para renovar las listas de la coalición. Cansado de que en las últimas semanas se le diera por liquidado para las listas, a día de hoy, Morera sigue siendo el presidente del Bloc, el principal partido de Compromís.

El presidente de las Cortes, al que cargos de la coalición consideran que se debe conceder una salida en el Senado, fue más allá en su órdago y pidió, incluso, ocupar un sillón en el Consell para poder trasladar su «experiencia» a la gestión en el supuesto de que se pueda repetir la mayoría progresista con los socios del Botànic. Enric Morera, en 2015 número dos por Valencia, no le discute en ningún caso la cabecera de la lista a Mónica Oltra. La vicepresidenta consideró que Morera es una «pieza fundamental» de Compromís y le deseó suerte. Pero el órdago sí abre un conflicto dentro del Bloc -partido mayoritario de la coalición- que apuesta por el joven Fran Ferri, su actual síndic en las Cortes, como número dos por Valencia por detrás de la propia Oltra como una imagen de evidente renovación.

Así que Morera -emblema de la vieja guardia de los nacionalistas desde hace más de dos décadas- irrumpe en un escenario en la provincia de Valencia que tiene réplica en Castellón, donde la decisión de la dirección de Compromís es dar continuidad al conseller Vicent Marzà como número uno. En Alicante, efectivamente, la nueva hornada de dirigentes del Bloc, encabezados por el portavoz en la Diputación, Gerard Fullana, hablan de redibujar un espacio en la provincia con nuevos liderazgos. Por lo pronto, dos nombres de mujer aparecen, según una fuente u otra, en la «quiniela» de Iniciativa para optar a encabezar esa lista a las Cortes: la ilicitana Mireia Mollá, que ya suma tres legislaturas en el parlamento; y la crevillentina Aitana Mas, directora general en la conselleria de Manuel Alcaraz, que podría contar con respaldo suficiente del resto de socios de la coalición para presentarse con garantías a esas primarias.

En principio, la intención del Bloc es respaldar, si quiere seguir, al conseller Rafa Climent para que ocupe un puesto de relevancia en la lista a las Cortes para dar continuidad a la labor del Botànic pero dejando claro que no tendría asegurada su continuidad en el ejecutivo en el caso de reeditarlo. Otros dos nombres de mujer vinculados al Bloc para ocupar uno de los primeros puestos de la lista. Solo una tendrá el premio de una plaza de salida: la ilicitana Marian Campello, ahora por esta cuota tras elegir afiliación; y la concejal de Altea Inma Orozco, que suena con fuerza como alternativa. Sin embargo, para ese puesto también hay un movimiento para impulsar una candidatura desde l'Alacantí. El veterano Toni Arques, del colectivo de la capital, no descarta presentarse pero el peculiar sistema de primarias de Compromís con listas cremallera y reserva de partidos, apenas le concede posibilidades salvo si ocupa un número más retrasado y sin opciones. Entre los adheridos independientes de la coalición, vuelve a aparecer el nombre de Josep Nadal, el popular cantante del grupo «La Gossa Sorda» para optar a las primarias. Fuentes de Compromís le conceden chance para repetir entre los cinco primeros puestos, que debería completar un miembro de los ecologistas de Els Verds.