Después de semanas de incógnitas no resueltas y algunos mensajes contradictorios, el secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Fomento, Javier Izquierdo, confirmó ayer a la consellera de Obras Públicas, María José Salvador, que la AP-7 será libre y gratuita a partir del 1 de enero de 2020. «Ni se va a prorrogar la concesión, ni se va a volver a licitar», aseguró a los periodistas Izquierdo, tras la reunión de trabajo mantenida entre los equipos de la conselleria y del ministerio. El Ministerio de Fomento asumirá el mantenimiento de los 367 kilómetros de autopista liberados, cuyo contrato de conservación que supondrá un importe de dieciséis millones de euros -doce de ellos en la Comunidad Valenciana-ya está en preparación. El próximo año también se licitarán los accesos a la AP-7 desde Vinaròs y Oliva, muy demandados por ambas poblaciones.

En Oliva, la Conselleria de Obras Públicas planteaba y el ministerio asume crear un nuevo acceso por el sur a la AP-7 (ya existe un enlace al norte de la población) para que el tramo de autopista liberado se convierta en la variante de ese municipio, lo que evitará el paso a través del núcleo urbano de los miles de vehículos que transcurren cada día por esta población de la Safor. Este proyecto de Oliva tendrá que remodelarse porque en el acceso sur había planeado una «playa de peajes» que ya no se incluye, para que sea un acceso que garantice el tránsito «libre».

El representante de Fomento no aclaró cómo piensa asumir el ministerio -sin aumentar el déficit- el mantenimiento de los 367 kilómetros liberados más las diez conexiones que le reclama Obras Públicas (con un coste de 220 millones) para «pinchar» la AP-7 y mejorar los accesos a esta carretera litoral y que el ministerio también asume y va a empezar a analizar. «Hay buena sintonía en cuanto a las soluciones. Iniciaremos los estudios de detalle y estableceremos en un protocolo la programación sobre cómo llevarlas a cabo», defendió al ser interrogado sobre los problemas de financiación y la falta de presupuesto. Aunque si de algo se tiene experiencia en la Comunidad Valenciana es en protocolos incumplidos. Aunque el ministerio se muestra firme en su decisión de acabar con todos los peajes. «Lo digo con la certidumbre de que el 1 de diciembre, la primera autopista del país que finaliza una concesión que no va a ser prorrogada va a ser la Burgos-Armiñón», aseguró Izquierdo.

La reunión bilateral Fomento-Obras Públicas también ha tratado la situación de las obras en la V21, cuyo proyecto se rehará para «minimizar» el impacto sobre la huerta valenciana, con la incorporación de los caminos de acceso a los huertos a la zona de ocho metros reservada para la expropiación, «de manera que se reducirá un tercio la afección y las expropiaciones del conjunto de la actuación», según se comprometió el representante del ministerio. El tercer carril se mantiene, aunque será un carril «Bus-VAO», para autobuses y vehículos de alta ocupación, para favorecer el incremento de ocupación de los coches privados que acceden a la ciudad. La consellera de Obras Públicas María José Salvador y el secretario de estado de Infraestructuras han alabado «el tono de la reunión y el clima de entendimiento» entre ambas administraciones «que ha sido productiva porque en la conselleria hemos hecho el trabajo que no hizo el anterior Gobierno [de Mariano Rajoy], que aplicó la desidia».