? El intento del concejal de Recursos Humanos durante la etapa del tripartito, el socialista Carlos Giménez, de subirle el sueldo al jefe del Servicio Médico del Ayuntamiento de Alicante, Andrés García Trillo, para que se hiciera cargo de los desfibriladores que se habían comprado para los Mercados municipales provocó una bronca con el entonces alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri. El dirigente socialista se negó a que el médico municipal, que hoy es el candidato del sector franquista para ser el alcaldable del PSOE en las próximas elecciones municipales, percibiese una productividad de unos 750 euros al mes (sin fecha concreta de caducidad) a cambio de que instalara unos desfibriladores que hoy, más de un año después, siguen empaquetados en cajas ante la negativa del médico a colocarlos si no cobra un extra en la nómina. Pese a los intentos de Giménez, broncas incluidas con Echávarri, la subida del sueldo al jefe del Servicio Médico quedó bloqueado en el área de Intervención.