El conseller de Educación, Vicent Marzà, sostuvo ayer durante su comparecencia en las Cortes Valencianas para detallar las cuentas de su departamento para 2019, que la inversión por alumno se situará en 6.350 euros, 1.183 más que al llegar al gobierno, lo que supone un 23% más que el curso 2014-15. Según Marzà -que dirige la segunda Conselleria con más presupuesto de la Generalitat- los 5.121 millones de su área para 2019 (7,1 % más) siguen en la línea de «la reversión de la mala gestión» y «consolidan las bases de un futuro de prosperidad, justicia social e igualdad de oportunidades».

La diputada popular Beatriz Gascó reprochó que el incremento en política lingüística «contrasta» con «recortes» en ayudas a familias o la integración de alumnos de educación especial, así como en las unidades de secundaria concertada, alumnos de las Escuelas de Idiomas (EOI) y beneficiarios de Xarxa Llibres. Desde Cs, las críticas vinieron porque se ha disparado la inversión en infraestructuras cuando este ejercicio solo lleven ejecutados un 23% , además de cuestionar las ayudas directas a asociaciones «nacionalistas».

Marzà destacó que Educación e Investigación crecen 324,9 millones, y que por segundo año consecutivo se invierte en Educación «más de lo que se invertía antes de la crisis», mientras que Cultura sube 15,3 millones y Deporte 4. Se destinan 308 millones para lo que llamó «una escuela transformadora» especialmente fomentando la escolarización de 0-3 años, con una oferta total de 737 aulas y 14.472 plazas gratuitas de 2 años y mejorando las condiciones del bono infantil, con 51 millones, el doble de lo que destinaba el gobierno anterior del PP.

Para las becas de comedor se han consignado 70 millones (22 más que en 2015), que permitirán llegar a 127.000 beneficiarios, 40.000 niños más que en 2015. Destacó la consolidación del programa de gratuidad de libros de texto, al que se destinarán 38 millones, (4,7 más que este curso). El gasto de personal asciende a 2.539 millones (80 más), con 6.000 profesores incorporados a la plantilla para rebajar la ratio media, mientras que en formación de profesorado hay 25,2 millones (3,6 más), lo que «permite aumentar el 75 % las plazas formativas», al pasar de 228.745 en 2014-15 a 374.350.

El programa de innovación educativa llega a 6 millones, un 25% más y se destinan 12 millones para mejorar la autonomía de los centros, mientras que en materia de atención a alumnos con necesidades específicas, se destinarán casi 395 millones, y la inversión en construcción de centros crece un 583% desde 2015, ya que pasa de 57,3 a 389 millones. A Universidades se destinarán 826 millones, 11 más que este curso.

Por otro lado, la consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián, defendió que el presupuesto de su departamento es «un hito» por superar los 400 millones, lo que permite recuperar el nivel de 2011. No obstante, indicó que «a pesar de ser buenos, no son los mejores» al estar limitados por la infrafinanciación, la deuda o compromisos de pago heredados. Cebrián desgranó en su intervención que cuenta con un 14,3% más de fondos, 52 millones más, hasta los 404 millones, llegando al 2% del presupuesto de gasto no financiero y un reflejo del «reconocimiento al sector agrario y las políticas ambientales».