El coste de los altos cargos y asesores del Consell crece por tercer año

Según el detalle del personal que figura en la previsión presupuestaria el coste total de los altos cargos y personal de confianza ronda ya los 9,5 millones de euros.

Es la cifra más alta desde que gobierna el Botànic, casi medio millón más que el año pasado y sobre un millón por encima del coste de directivos y asesores que tuvo el último gobierno del PP con Alberto Fabra en 2015. El año pasado (presupuesto de 2018) el coste de altos cargos y eventuales del bipartito superó por primera vez al que tenían los populares.

Con todo, en el actual Consell siempre han defendido que todo su personal de confianza es conocido y que no se esconde nada mientras que el PP tenía dentro del sector público una especie de administración en paralelo cuyo personal realizaba funciones para las conselleries, aunque estaba adscrito a las mercantiles públicas.

Del presupuesto se desprende también que el Consell cuenta en la actualidad con 101 altos cargos sin contar a los del sector público y 78 asesores y personal de confianza. El PP tenía menos altos cargos, 90, pero contaba con más eventuales, 92, frente a los 78 de PSPV y Compromís. También se da la circunstancia de que estos dos partidos siempre defendieron cuando estaban en la oposición la necesidad de rebajar el número de altos cargos y asesores del PP.

En conjunto, el bipartito tiene 179 cargos y eventuales, solo tres menos de los que en conjunto tenía el PP, que cuando abandonó el poder contaba con 182, según el recuento realizado.

Presidencia es el departamento que más altos cargos y personal eventual tiene en la actualidad, con un coste de 2,2 millones de euros. La segunda es vicepresidencia con 1,2 millones y la tercera Educación con 1,1.

Administración con pocas manos

El primer presupuesto que diseñó el Botànic, el de 2016, tenía 93 altos cargos frente a los 101 del próximo año, siempre sin contar el sector público. Respecto a los asesores al servicio de las conselleries se ha pasado de los 69 del primer año a los 78 del nuevo presupuesto.

Uno de los argumentos del Consell cuando se pregunta por esta cuestión es que en la Generalitat faltan manos ya que la Administración valenciana es raquítica respecto a la de otras autonomías ya que igual que ocurre con la financiación la Comunitat Valenciana también anda a la cola en número de funcionarios respecto al número de habitantes. El Consell del Botànic también defiende la necesidad de contar con personal suficiente en la Administración para garantizar los derechos de las personas frente al dogma neoliberal que pregona el adelgazamiento del Estado. También hay que tener en cuenta que desde 2015 se ha producido una subida salarial en la Administración de más del 8 %, crecimiento marcado por los presupuestos del Estado y que encarece el coste del personal.