Hacienda ha destinado 51,6 millones para el Instituto Valenciano de Administración Tributaria, que pretende ser la Agència Tributaria Valenciana. Según explicó Soler, la partida «sienta las bases de la estructura» una vez se salven los obstáculos que plantea la dirección general de Función Pública al tener que modificar las condiciones laborales del personal funcionario que trabajará en ella. Precisamente, la dotación es para hacer «efectivo» el incremento de personal y medios técnicos para formar equipos especializados y potenciar la lucha contra el fraude.