La vida sin excesivos sobresaltos de los miembros de la Mesa de las Cortes, el órgano de gobierno del Parlamento valenciano, está, sin embargo, muy bien remunerada. Ser miembro de ese selecto club, donde están representados todos los partidos, sale a cuenta. Todos ellos cobraron el año pasado más que el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y casi el doble que la vicepresidenta, Mónica Oltra.

El jefe del Consell, que realiza su declaración de ingresos ante las Cortes en su condición de diputado electo en 2015, declara salarios por valor de 80.176 euros, mientras la vicepresidenta, portavoz y consellera de Igualdad, Mónica Oltra, ingresó 57.638. Puig cobró 74.037 euros de rendimientos netos del trabajo; otros 5.880 euros por dividendos y 321 euros por rentas inmobiliarias. Sin embargo, el vicepresidente segundo de la Mesa de las Cortes, Alejando Font de Mora (PP), declaró ingresos por valor de 107.000, de ellos 86.149 euros de la cámara, 13.376 euros de trienios de la Generalitat, 593 euros por un seguro también del parlamento y 6.894 euros por arrendamientos, lo que arroja un total de 107.012 euros. El secretario segundo de la Mesa, el diputado de Ciudadanos Emilio Argüeso, declaró 90.000 euros. El presidente de Les Corts, Enric Morera, declara unos ingresos netos de 65.711 del salario del Parlamento autonómico, aunque en este caso difunde la cantidad neta porque sus emolumentos en bruto, según el portal de transparencia de la cámara, se acercan a 90.000 euros anuales, más que el presidente de la Generalitat. De hecho, en varias ocasiones, Morera ha respondido a preguntas de este diario que considera que es injusto que el presidente de las Cortes cobre más que el de la Generalitat.

El portavoz socialista en las Cortes, Manolo Mata, percibió 75.991 euros, procedentes mayoritariamente de las retribuciones parlamentarias (73.398), pero también de rendimientos de capital inmobiliario (2.175) y de intereses de cuentas bancarias (418 euros). El portavoz de Compromís, Fran Ferri, ha incluido en su declaración 75.334 euros mientras que la portavoz de Ciudadanos, Mari Carmen Sánchez, percibió 71.129 euros. Los portavoces parlamentarios que menos ganaron en 2017 fueron la del grupo popular, Isabel Bonig, con 60.449 euros por rendimientos del trabajo, aunque la lideresa popular renunció al complemento de exclusividad junto a otros miembros de su dirección lo que le permite cobrar por otras vías y el síndic de Podemos, Antonio Estañ, declara 59.146 euros.

El diputado que más dinero ingresó el año pasado fue el socialista Fernando Delgado, con cerca de medio millón de euros, procedentes en su mayoría de plusvalías de la venta de un activo inmobiliario en la capital de España, que le reportaron 425.206 euros, según consta en la declaración de bienes entregada a la Cámara. Delgado vive desde hace años en la localidad de Faura, en el Camp de Morvedre. El veterano escritor ingresó como diputado 53.409 euros, a los que añadió por cursos y conferencias otros 16.823 euros, además de 739 procedentes de acciones cotizadas en bolsas, 442 euros de intereses de cuentas bancarias y 208 euros de rendimientos de operaciones de seguros.

La consellera expropiada

Se da la curiosidad que la actual consellera de Sanidad, Ana Barceló, obtuvo en 2017, cuando aun no había accedido al cargo, 135.000 euros, de ellos 66.606 de las Cortes y otros 68.402 por una expropiación forzosa que sufrió de un inmueble. Tras ella se sitúan el titular de Economía, Rafa Climent, con 69.244 euros ; el conseller de Educación, Vicent Marzà, con 64.195 euros de sueldo y 2.014 de rendimiento de capital inmobiliario, y la responsable de Vivienda, Maria José Salvador, que percibió 53.944 euros. El popular Miguel Ángel Mulet cobró 107.815 euros y su compañera de grupo María José Català percibió 90.302.

Entre los no adscritos, Alexis Marí percibió 59.737 euros; el ex del PP Miquel Domínguez 53.409 y la ex de Podemos Covadonga Peremarch 44.595 euros.