La sección quinta de la Audiencia de València ha rechazado por tercera vez la excarcelación del expresidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, según ha podido saber INFORMACIÓN de fuentes conocedoras de los hechos. Los magistrados señalan en el auto en el que deniegan la libertad que "no se duda en absoluto de que Eduardo Zaplana padece una leucemia" por la que necesitó un trasplante de médula. Pero señalan que antes de ser detenido también tuvo recaídas de su enfermedad por las que necesitó ser hospitalizado. Durante uno de estos ingresos, Zaplana "estuvo gestionando telefónicamente sus negocios desde el hospital, tal como se desprende de las intervenciones telefónicas practicadas" y que aún permanecen secretas.

En el mismo auto los magistrados de la sección quinta de la Audiencia de València recuerdan que "la vida del señor Zaplana en libertad no transcurría en el estado de asepsia que ahora se dice que necesita de forma vital para sobrevivir". Todo lo contrario, recoge el auto al que ha tenido acceso INFORMACIÓN. El exministro de Trabajo mantenía una "intensa actividad social y profesional que incluía numerosos viajes, normalmente con una frecuencia superior a la semanal".

La defensa de Eduardo Zaplana ha solicitado esta mañana ante el tribunal su puesta en libertad y la declaración del forense que apoyó su excarcelación a los pocos días de ser detenido e ingresar en prisión. Se trataba de la cuarta vista que se celebra en la sección quinta de la Audiencia de València a petición del letrado que defiende al expresidente de la Generalitat para intentar que se decrete su libertad. Zaplana está en prisión provisional desde el pasado 24 de mayo, como el principal investigado del Caso Erial que investiga el presunto cobro de comisiones ilegales por parte del exministro de Trabajo, que fue detenido junto a su círculo más cercano de confianza y el empresario Vicente Cotino. En la causa también está imputado el expresidente de las Corts, Juan Cotino.

El abogado de Zaplana insistia en los «motivos humanitarios» para que la sala acuerde su libertad provisional o, al menos, el arresto domiciliario, con limitación de todo contacto con el exterior. Hasta ahora tanto la Jueza de Instrución 8, la Fiscalía Anticorrupción y los magistrados de la Audiencia de València siempre se han negado a concederle la libertad por la gravedad de los delitos que se le imputan, el riesgo de fuga y de destrucción de pruebas. Una decisión que han ratificado hoy por cuarta vez.

Además de la petición para que declare el forense que firmó el informe, la defensa de Eduardo Zaplana ha alegado el deterioro de la salud que está sufriendo el exministro y portavoz del gobierno de José María Aznar, ya que en estos cien días en el centro penitenciario ha perdido ocho kilos. Aunque otras fuentes cifran en sólo dos kilos el descenso del exministro de Trabajo. La decisión de los magistrados de la sección quinta de la Audiencia de València se ha conocido a las pocas horas de celebrar la vista solicitada por la defensa. El letrado de Zaplana también ha solicitado que mientras se decide si declara el forense se revoquen los autos de prisión provisional y se ordene el arresto domiciliario del expresidente de la Generalitat. Una petición que, de nuevo, ha caído en saco roto.