La llegada del líder del PSOE, Pedro Sánchez, a la Moncloa ha forzado al Consell a hacer pequeños cambios que afectan al segundo y tercer escalón del gobierno valenciano así como al núcleo duro del presidente, y que esta semana se han completado para dejar niquelada la retaguardia del ejecutivo autonómico. Tras la marcha de la exconsellera de Sanidad, Carmen Montón, al ministerio del ramo y la remodelación de la Conselleria con Ana Barceló al frente, así como el fichaje del alicantino Julián López-Milla por parte del Ministerio de Fomento, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y la vicepresidenta Mónica Oltra, se han visto obligados a hacer retoques tras perder dos altos cargos en Presidencia y en la Conselleria de Vivienda. Esta misma semana, Puig ha cerrado los reajustes que necesitaba reordenando las responsabilidades de ocho asores y fichando a una periodista que colabore en la redacción de sus discursos.

El Consell nombró en su último pleno del verano al doctor en Derecho por la Universitat de València, Fernando Flores, nuevo director general de Análisis de Políticas Públicas y Coordinación de Presidencia de la Generalitat, en sustitución de Julián López-Milla, número uno del PSPV al Congreso por la provincia de Alicante, quien precisamente dejó su escaño como diputado nacional para desarrollar este cargo, en el que ha estado ocho meses. Fuentes cercanas al presidente Puig aseguran que los últimos reajustes de categoría en la cámara de asesores del presidente -publicados en el DOGV el pasado martes, como recogió este diario- son decisión de Flores. Mientras tanto, López-Milla lleva una semana y media como director general de la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (SEITT) del Ministerio de Fomento, un cargo que le reporta 113.490 euros al año.

Antes de llegar a los días de mayor sequía política (las dos últimas semanas de agosto) y en el último pleno del Consell, el gobierno valenciano dejó listo otro relevo en la Conselleria de Vivienda. El hasta ahora director general de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje, Josep Lluís Ferrando, un experto urbanista conocido por desarrollar el Plan de Actuación Territorial e Infraestructuras Verdes del Litoral (Pativel), pasa a estar al frente de la Secretaría Autonómica de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio que dirige la consellera Maria José Salvador. Ferrando sustituye así a Josep Vicent Boira, quien ha sido nombrado comisionado del Gobierno en el Corredor Mediterráneo. El sustituto de Boira era una decisión de Compromís.

En el puesto de director general de Ordenación del Territorio se ha nombrado a Rosa Pardo, que ha sido arquitecta interina del Ayuntamiento de Castellón.

Sin embargo, la vacante en la Secretaría Autonómica de Transparencia desde el pasado 27 de abril, fecha en que la alcoyana Zulima Pérez fue nombrada nueva subsecretaria de la Conselleria de Hacienda, sigue sin cubrirse. Transparencia es un área que controla Compromís y la decisisión de su relevo está en buena parte en las manos del conseller de Transparencia, el alicantino Manuel Alcaraz.

Los cambios en el gobierno de España han traído una remodelación de cargos en la segunda y tercera línea del Consell que empezó con el relevo de la número uno de la Conselleria de Sanidad. Nada que ver con otras remodelaciones veraniegas nacidas de decisiones del propio Consell, tomadas en buena parte por fricciones en el gobierno del mestizaje, como la que afectó al ejecutivo autonómico en el verano de 2016 y que acabó con el relevo de la secretaria autonómica de Economía, Maria José Mira, que pasó a Hacienda por discrepancias con el conseller de su área, Rafa Climent, por los horarios comerciales.