Ximo Puig y Mónica Oltra comparecerán hoy juntos tras el pleno del Consell, el último del curso hasta después de agosto. Harán balance de tres años de gobierno de coalición. Presidente y vicepresidenta exhibirán comunión después de haber desactivado el último foco de conflicto en la gestión de gobierno. Un concepto como «el nuevo ROF» (reglamento orgánico y funcional) de Hacienda parece una cuestión burocrática y de mero trámite, pero esconde el que ha sido un auténtico quebradero de cabeza entre las dos patas del Govern del Botànic en las últimas semanas.

Por fin, ayer, según fuentes del ejecutivo, el «consellet» (la reunión de subsecretarios preparatoria del pleno de los viernes) dio luz verde al dichoso ROF tras idas y venidas anteriores por la negativa de Compromís a asumirlo mientras el titular de Hacienda, Vicent Soler (PSPV), no daba solución a algunas de sus demandas. En especial, a las de Oltra con respecto al personal para atender la dependencia.

La modificación del reglamento de la Conselleria de Hacienda supone dos cuestiones especialmente relevantes para Puig: por un lado, la escisión del Institut Valencià de Finances (IVF) por la que se erige el banco público dedicado únicamente a funciones crediticias, sin competencias de política financiera, que quedan en manos del Consell.

Por otra parte, el nuevo ROF conlleva el traspaso a la secretaría autonómica de Modelo Económico (Hacienda) de ayudas empresariales que hasta ahora estaban varadas en el departamento de Rafael Climent (Compromís) a pesar de que habían sido anunciadas públicamente por Puig. Los compromisos con Air Nostrum (Podemos lo cuestionó en las Cortes de la mano del PP) y Ford para proyectos de contenido medioambiental están entre los desbloqueados ahora, según fuentes consultadas.

El reglamento implica asimismo una ampliación de los servicios informáticos que cargos de Compromís interpretaban (y criticaban) como un aumento de plantilla de Hacienda y que el departamento de Soler defiende como centralización de los equipos dispersos hasta ahora en diferentes conselleries.

Medio millar de evaluadores

La luz verde de los subsecretarios de la formación de Oltra se produce «en paralelo» (es el término que empleaban ayer fuentes del Consell) a la vía de solución aportada por Hacienda para que Oltra pueda incorporar a medio millar de evaluadores. La contratación se realizará de manera escalonada, previsiblemente a partir de septiembre y hasta final de año, de manera que pueda ser digerida por el Ministerio de Hacienda y sus restricciones al aumento de gasto público.

En la misma senda de solución está la equiparación salarial de las cuidadoras del Institut Valencià d'Atenció Sociosanitària (Ivass), cuestión que provocó una discusión pública entre Oltra y Soler tras un pleno del Consell. El asunto se da por encauzado, aunque hay flecos que dependen del ministerio.