Triunfo claro de Soraya Sáenz de Santamaría en las primarias del PP en la provincia de Alicante. La que fuera vicepresidenta del Gobierno con Mariano Rajoy, arrastrada por el respaldo del aparato provincial que encabeza José Císcar y regional, consiguió una clara victoria con 1.525 votos, casi el 42,5% de las papeletas que se emitieron en las 58 mesas abiertas durante la jornada. Ganó en Benidorm, Alcoy, Orihuela y la mayoría de los pueblos de l'Alacantí. Le sacó más de once puntos de diferencia a Pablo Casado que logró amplias victorias locales como, por ejemplo, en Elche con un total de 1.115 votos. El éxito de Casado encumbra a una serie de dirigentes del PP como Pablo Ruz, Adrián Ballester o Alejandro Morant. Aunque falta por computar los resultados del resto de España todo apunta que serán los dos aspirantes que pasarán el corte de cara al congreso nacional del 20 y el 21 de julio en Madrid.

El mal resultado de María Dolores de Cospedal, apenas 646 papeletas en la provincia y un 17'5% de los votos, deja en una situación crítica al presidente de la Diputación, César Sánchez, que era su principal valedor en las comarcas alicantinas. Cospedal maquilló algo sus números por los resultados en Calp, feudo de Sánchez, o en Elda, donde ganó con claridad gracias al respaldo de la senadora Adela Pedrosa. Fracaso sin paliativos de José Manuel García Margallo. El número uno del PP de Alicante en el Congreso consiguió apenas 52 sufragios en toda la provincia, poco más del 1% de las papeletas. La mitad de ellos los cosechó en la sede de Xàbia, donde Margallo milita y localidad en la que emitió su voto.

En la Comunidad Valenciana también venció Soraya Sáenz de Santamaría con 3.640 votos frente a los 3.159 de Casado. María Dolores de Cospedal se quedó en apenas 1.185 mientras José Manuel García Margallo apenas cosechó 125 y superó por muy poco a Elio Cabanes, concejal de la Font de la Figuera, que reunió 119.

Cospedal estudia impugnar una mesa de Orihuela tras votar la madre de Eva Ortiz sin estar en el censo

La candidatura de María Dolores de Cospedal estudia impugnar una mesa electoral en Orihuela (Alicante) por permitir que vote en las primarias del partido la madre de la secretaria general del PP valenciano, Eva Ortiz, sin estar en el censo, según han informado a Europa Press fuentes 'populares'.

A menos de una hora para que se cierren las urnas en este proceso de primarias para elegir al sucesor de Mariano Rajoy al frente del partido, las diferentes candidaturas han empezado a denunciar las primeras irregularidades en las mesas de votación, que hasta este mediodía se había desarrollado sin "incidencias reseñables", según el comité organizador del congreso.

De hecho, fuentes de este órgano que se encarga de los preparativos del XIX congreso del PP han señalado esta misma tarde que por lo pronto no han recibido ninguna denuncia formal sobre irregularidades en mesas electorales.

SE PERMITE VOTAR SIN ESTAR EN EL CENSO

La candidatura de Cospedal ya ha avanzando que estudia la posibilidad de impugnar una de las mesas de votación en Orihuela (Alicante) en la que votó la madre de Eva Ortiz, que es 'número dos' de Isabel Bonig en el PP valenciano, sin estar inscrita en el censo. El interventor de Cospedal se ha percatado de este hecho, que ha causado malestar en el equipo de la exministra de Defensa.

De la misma manera, el equipo de Cospedal considera que en algunas mesas de Barcelona se han producido ciertas irregularidades y presiones por parte de la candidatura de Pablo Casado, por lo que van a presentar denuncias ante el presidente de la mesa, han informado fuentes próximas a la secretaria general del PP.

El coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maillo también ha dicho que hasta este mediodía no se había producido ninguna incidencia reseñable pero que si se produce algún hecho puntual, lo valorará la comisión organizadora del XIX congreso del PP que preside el eurodiputado Luis de Grandes.

"Vamos a ver qué calibre tienen esas informaciones", ha señalado Maillo en La Sexta, tras quitar hierro a esas denuncias de irregularidades, ya que, según ha dicho, "en todo proceso electoral hay dificultades en algún sitio y luego se resuelven con normalidad".