El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le lanzó ayer un jarro de agua fría para la Comunidad Valenciana, congelada en el caso concreto de la provincia de Alicante. El nuevo jefe del ejecutivo descartó reformar el sistema de financiación en lo que queda de legislatura -año 2020- aunque anunció que negociará mejoras económicas para las comunidades autónomas. Este anuncio llegó en el Senado, en el primer control parlamentario al que se somete Sánchez en las Cortes y a menos de 48 de horas de cerrarse en la citada cámara el debate a las enmiendas de los presupuestos, que tampoco destinarán ni un euro más a Alicante en inversiones.

El jefe del ejecutivo dejó claro ante una pregunta de la senadora de Coalición Canaria Maria del Mar del Pino Julios en relación al compromiso del nuevo Ejecutivo con la agenda canaria que su Gobierno no va a poder «renovar» el sistema de financiación autonómico en los dos años que restan de legislatura, lo que supone un varapalo para la Comunidad Valenciana y para Alicante, provincia que se sitúa en el furgón de cola de las inversiones por habitante.

El atasco en la reforma del sistema de financiación autonómica, uno de los puntos clave de la agenda valenciana del Consell y pilar de sus reivindicaciones a Madrid, enquista el problema de falta de recursos en la Comunidad, una autonomía en la que todos los grupos en las Cortes Valencianas han reconocido mediante declaraciones institucionales el ninguneo económico e inversor por el sistema de financiación que se implantó con José Luis Rodríguez Zapatero en la presidencia del Gobierno y que Mariano Rajoy no reformó pese a su compromiso de hacerlo ante la caducidad del mismo.

Lo que sí anunció Pedro Sáchez es que su gobierno hará mejoras para todas las comunidades autónomas hasta la convocatoria de las nuevas elecciones, si bien no concretó nada. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se revolvió contra Sánchez y aseguró que mantendrá todas las reivindicaciones. El mensaje se lanzó a menos de 24 horas de concluir el debate en el Senado de los Presupuestos Generales, una fase en su tramitación en la que la Cámara Alta tenía que incorporar las enmiendas parciales. Finalmente, el Senado aprobó el lunes el texto del proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2018 con la incorporación de 44 enmiendas del PP y del Partido Aragonés (PAR), con lo que culminó su tramitación. El proyecto de presupuestos vuelve ahora al Congreso para aprobarlos definitivamente la semana que viene sin que se contemple un solo euro más para la provincia.

El lío de la regata

La única enmienda que se ha tenido en cuenta y que afecta a la provincia es una vinculada a la Volvo Ocean Race, incorporada por el PP en el Senado para otorgar beneficios fiscales a los patrocinadores de la salida de la regata después de que en la tramitación previa en el Congreso los populares no dijeran ni mu sobre este asunto. Es más, el PP vetó junto a Cs en el Congreso la enmienda a las cuentas generales que presentó el PSOE en la que se reclamaban beneficios fiscales para los patrocinadores de la salida de la Vuelta al Mundo al Vela previa calificación del acontecimiento deportivo como de «excepcional interés público». La enmienda del PSOE no prosperó en el Senado al retirar los socialistas sus modificaciones a las cuentas al llegar Sánchez al Gobierno.

Compromís añadió esta petición sobre la Volvo en el Senado al tiempo que mantuvo sus enmiendas a los presupuestos presentadas en la Cámara Baja y que reclamaban 642 millones de euros para la provincia de Alicante a sacar, sobre todo, de las bonificaciones a los planes de pensiones privados. La coalición criticó ayer que senadores de las comarcas de Alicante y resto de la Comunidad del PP, PSOE y Cs impidieron que se modificaran las cuentas en aspectos urgentes como el sellado del vertedero de la Murada (Orihuela) y Sierra de Abanilla así como el apoyo que necesitaba la prueba a vela.

La propuesta de mejora de Compromís sobre la Volvo era similar a la que llevó el PSOE al Congreso pero que luego no llevó al Senado. La coalición pedía a la Cámara Alta declarar la salida de la regata evento de «excepcional interés público», pero ampliaba la enmienda del PP al permitir exenciones en tasas estatales por el uso del puerto. No obstante, la coalición pedirá que esta enmienda se vote por separado paa poder dar su apoyo a la misma en la jornada de votación que tendrá lugar la semana que viene en el Congreso para su aprobación definitiva.