El presidente de la Diputación, César Sánchez, aprovechará el pleno de mañana, entre otras cosas, para un asunto menor pero que tiene su transfondo a un año de elecciones. El responsable de la institución alicantina llevará a la sesión ordinaria del mes de junio un «retoquito» en el área de Gestión del Territorio que dirige el diputado y vicepresidente de la institución Javier Sendra para dotarle de competencias en la protección de animales.

Además, añade el concepto «medio ambiente» en la nomenclatura del área, dotándola así de dos conceptos -una visión animalista y la protección del medio ambiente- modernos y que pueden captar la preocupación de un buen sector social a un año de las elecciones municipales y autonómicas. En definitiva. Ha dotado de una cara más amable y más cercana a un departamento que se presta a ello, sobre todo cuando está bajo la dirección de un presidente con amplia trayectoria como socio de organizaciones ecologistas. La propuesta es que el área de Gestión del Territorio pase a llamarse área de Medio Ambiente y Protección Animal. Este es el área de la que depende la Oficina Provincial de la Energía o los consorcios de residuos.

Otro punto que, por fin, recoge el pleno es la marcha oficial del diputado imputado del PP, Miguel Zaragoza. La sesión de mañana da cuenta de la salida del titular de Bienestar Social tras su investigación por supuestas irregularidades en una clínica de Gran Alacant cuando era alcalde de Santa Pola. La salida de Zaragoza supone la entrada de uno de los asesores de Sánchez como diputado provincial: Joaquín Lucas, presidente local del PP de Catral. Lucas mantendrá las competencias de Zaragoza, según Sánchez.