El Consell está trabajando en un plan para atajar la exclusión financiera en los pueblos con menor población y quiere hacer partícipe del mismo a municipios y diputaciones. Las conversaciones para abordar una serie de medidas tales como la instalación de cajeros en edificios públicos o las distintas vías para suplir las gestiones básicas que puede hacer un banco ya se han iniciado con la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), según aseguraron fuentes del Consell. El plan se enmarca dentro de la llamada Agenda Valenciana Antidespoblament (Avant), la actuación que anunció el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, en 2017 en el Seminario de Rincón de Ademuz y que se puso en marcha para luchar, entre otros problemas, contra la exclusión que crea la ausencia de entidades bancarias en algunos sectores de las poblaciones más pequeñas.
Entre otros ejes autonómicos, para llevar a cabo este plan figuran la Conselleria de Hacienda, la Dirección General de Administración Local y el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). Sin embargo, el desarrollo de cuantas medidas se estudien y diseñen contará con la participación de los municipios y con las tres diputaciones, aunque con las instituciones provinciales todavía no se han mantenido reuniones para establecer este plan en el marco de Avant.
No obstante, sí se abordó la cuestión en 2016 con la Diputación de Alicante. En plena fase de desencuentros entre el gobierno valenciano y la institución que dirige el popular César Sánchez por los dos decretos del Consell para regular las competencias de la Diputación en materia turística y deportiva y con una incomunicación absoluta entre el presidente Puig y César Sánchez, miembros del Consell y del IVF hablaron con diputados alicantinos sobre la posiblidad de crear un plan de acción en las comarcas más despobladas. Se plantearon acciones para atajar la exclusión financiera que el cierre de entidades bancarias estaba produciendo, por ejemplo, en la gente mayor. En este caso, la Diputación tenía que contribuir, siempre según fuentes consultadas, de forma económica o licitando contratos de puesta en marcha de cajeros o de otras experiencias piloto en consonancia con el IVF.
Las conversaciones se mantuvieron de forma genérica porque la Diputación no llegó a solicitar más información concreta sobre cómo formar parte de esas experiencias piloto y apeló a SUMA como el organismo que podría encargarse de ello en Alicante. En realidad, no hubo demasiado interés en participar de un plan conjunto con el Consell. Sin embargo, la propuesta avanzó algo más con la Diputación de Valencia, aunque realmente no se llegó a hacer nada en la práctica. La Diputación de Castellón, por su parte, solicitó algo de información.
Retomar las conversaciones
Después de las conversaciones de finales de 2016 surgió la Agenda Valenciana Antidespoblament que lleva la Dirección General de Administración Local y que incluye la cuestión de la exclusión financiera. Dentro de ese marco se está trabajando ahora y ya se han producido las primeras reuniones con los municipios. El plan se llevará a cabo con la Conselleria de Hacienda, la Direccion General de Administración Local, la FVMP, el IVF y las tres diputaciones, con quien se retomarán las conversaciones para impulsar actuaciones conjuntas.
Además de la exclusión financiera, que en la provincia corren el riesgo de sufrir más de 15.000 alicantinos, las comarcas más despobladas se enfrentan también a la brecha digital, donde juega un papel importante la Conselleria de Hacienda, que ya trabaja en acciones para garantizar la bancha ancha 30 Mb en todos los municipios.
