Las reivindicaciones de más inversiones para la provincia de Alicante en los Presupuestos Generales del Estado para 2018 no han encontrado este año como aliado al exministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, que en las uentas de 2017 pidió un trato justo para la provincia de Alicante. El número uno del PP provincial al Congreso de los Diputados se ha alineado esta vez con las cuentas del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, elaboradas por el departamento que dirige el ministro de Hacienda Cristóbal Montoro -con quien Margallo mantiene públicas diferencias en materia fiscal- y avaló ayer en una rueda de prensa en Alicante las inversiones que los presupuestos estatales destinan a la provincia, una de las más castigadas en la inversión por habitante.

El exministro, que compareció ayer en la sede del PP provincial junto al también diputado nacional Joaquín Albadalejo para analizar la sostenibilidad del actual sistema de pensiones, evitó dar su particular valoración de los presupuestos para 2018. Manifestó que no iba a decir nada distinto a lo que ya han indicado sus compañeros de partido en Alicante, entre ellos Albadalejo, que la semana pasada ofreció una comparecencia junto a la senadora Adela Pedrosa para aplaudir las cuentas. «Soy muy prudente con la puesta en escena», bromeó el extitular de Asuntos Exteriores, que este año avaló los presupuestos del Estado por ser los más sociales y por «recoger los frutos» de la mejora de la economía. También los justificó porque son «para un corto periodo de tiempo».

No obstante, Margallo instó al Gobierno a cambiar el modelo presupuestario para que deje de estar ligado «a una economía de guerra» y sea el modelo de «una economía de consolidación».

El exministro de Asuntos Exteriores consideró que el presidente del Gobierno optará por prorrogar los Presupuestos Generales del Estado si no logra finalmente el respaldo para las cuentas de este 2018, aunque sostuvo que el PVN dará su confianza cuando exista un nuevo gobierno en Catalunya que permita retirar la aplicación del artículo 155. «Haríamos bien en cerrar unos presupuestos cuanto antes y en ponernos a trabajar en las reformas que permitan unos presupuestos de recuperación», afirmó. En este sentido aseguró no entender las razones que esgrime el PSOE para no avalar las cuentas y pidió a los socialistas que no se dejen vencer por prejuicios.

A las puntadas de Margallo al PSOE -a las que se sumó el diputado torrevejense Joaquín Albaladejo- se unió también la presidenta del PP de la Comunidad, Isabel Bonig, que presionó a los socialistas recordándoles que sin presupuestos no hay inversiones para la Comunidad.

Mientras tanto, el diputado nacional y coordinador de presupuestos de los Diputados y Senadores del PSPV, Herick Campos, avanzó ayer que van a presentar varias enmiendas a los presupuestos para reclamar 338 millones más para la Comunidad con el fin de mejorar la inversión por habitante. Junto al portavoz del PSPV, Jorge Rodríguez, Campos indicó que las cuentas de este año continúan «las políticas de recorte y abandonan la agenda valenciana». El diputado pidió el apoyo del PP de la Comunidad para las enminedas socialistas.

Podemos, por su parte, anunció ayer que a través de Unidos Podemos en el Congreso también presentará enmiendas para exigir un «trato justo» con la Comunidad. La diputada valenciana Ángela Ballester, valoró que las cuentas no revierten los recortes y «continúan estrechando el ámbito de lo publico y limitando el ámbito del bienestar». Destacó que promesas del ministro de Fomento, Iñigo de la Serna, realizadas en València «se han quedado en nada, lo que supondrá que la línea entre Alicante y Murcia no pueda ser digna y del siglo XXI». Por ello, señaló que se están reuniendo con municipios y colectivos ciudadanos para recopilar sus demandas y poder trasladarlas al Congreso en forma de enmiendas.