Hace sólo unos días, durante un encuentro en Benidorm, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ya anunció la aportación que realizará la administración autonómica para garantizar los primeros pasos del «Distrito Digital» de Alicante: 8,5 millones durante los años 2018 y 2019. La iniciativa del Consell, concebida con una sede principal que permitirá dar utilidad a una parte del complejo de la Ciudad de la Luz cumpliendo con las limitaciones todavía marcadas por Europa, tiene como objetivo, según explicó el jefe del Consell, sumar «todas las sinergias en la generación de un gran ecosistema digital valenciano». Convertido en uno de los grandes anuncios de Puig durante el último debate de política general en las Cortes, el presidente de la Generalitat detalló en esa cita los tres instrumentos con los que se articulará la financiación del proyecto a lo largo de los dos próximos años.

Primero: el plan de atracción empresarial y de talento con un ambicioso plan de incentivos, ya mencionado. En segundo lugar, también se contempla la participación en alguna empresa del sector licitando el socio tecnológico que permita impulsar directamente alguno de los objetivos del «Distrito Digital». Finalmente, se pondrá en marcha un programa de eventos para impulsar la Comunidad como un «ecosistema potente» vinculado a este nuevo polo económico con «la voluntad máxima de cooperación entre las empresas y las instituciones».

«No queremos competir con el mercado privado. Buscamos abrir nuevas oportunidades con la transición digital», explicó el jefe del Consell que destacó la estrecha colaboración que deberá tener el «Distrito Digital» con el despliegue de la Agencia Valenciana de la Innovación. «Debe formar parte de nuestro ADN económico para el futuro», zanjó el titular del Consell.