Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Entrevista a Rubén Alfaro, presidente de la Federación Valenciana de Municipios

Rubén Alfaro: «El socialismo alicantino debe tener voz propia para reivindicar en València y en Madrid»

El alcalde de Elda apunta que los consistorios locales han sido los grandes paganos de la crisis

Rubén Alfaro: "No soy de Ángel Franco; si tengo algún apellido es el de Ximo Puig"

Hacía mucho tiempo que no había un presidente alicantino de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias

Ponerle voz a las necesidades de los alcaldes en la Comunidad Valenciana. En el seno de la asamblea, cada municipio tiene deseos y anhelos que, en la medida que sean comunes, yo tengo que trasladar para que se escuchen y se reivindiquen.

¿Y qué problemas tienen los municipios de la Comunidad?

Son problemas, en gran medida, generales. La falta de respuesta del Gobierno de España a una cuestión obvia: la vida de los ayuntamientos es fundamental para los vecinos. Los municipios son la primera trinchera de la política. Cuando hay un problema, sea de nuestra competencia o no, el vecino pide una explicación directamente al alcalde. Y hay una segunda cuestión que tiene que ver con la gestión económica. Las restricciones de gasto, limitaciones de financiación o de endeudamiento las hemos pagado sólo nosotros. Somos los grandes «paganos» de la crisis, sobre todo, en el control del déficit.

Su otra gran responsabilidad es la alcaldía de Elda

Elda tiene retos. Lo que puede ofrecer mi ciudad a la provincia es un valor industrial junto a todo el eje del Vinalopó. Y en los últimos años, la política industrial no ha sido, precisamente, la más querida por las administraciones superiores. Podemos ofrecer mucho como territorio industrial. Pero tiene que haber una creencia de que la industria de la Comunidad Valenciana y de esta provincia puede y debe tirar también del carro de la economía. Nosotros tenemos que potenciar ese eje del Vinalopó. Elda será menos sin su comarca. Y el Vinalopó también será menos sin tener en cuenta a Elda. La suma de Elda y Petrer está cerca de los 100.000 habitantes. Es la quinta de la Comunidad y está en un lugar estratégico por la industria del calzado, la comunicación con Madrid...

¿Y no cree que está desaprovechando ese papel como presidente de todos los alcaldes de la Comunidad y primer edil de Elda?

Es verdad que todo es mejorable. Y soy el primero que, desde luego, tengo que hacer autocrítica. Pero también es verdad que yo creo que sí hemos logrado que alguna reivindicación de los alcaldes se haya podido transmitir a través de ese altavoz como, por ejemplo, con el tema de la industria para que todos los territorios cuenten igual y se potencien.

Pues se le escucha poco...

Es verdad. No le discuto que en ocasiones se nos debería escuchar más y elevar un poco nuestra voz.

¿Cómo valora dos años y medio después la labor del Consell del Botànic con el Consell del BotànicPSPV

Desde el punto de vista de los municipios, creo que ha sido positivo. Ha supuesto una apuesta muy clara por la labor de las corporaciones locales con la puesta en marcha del Fondo de Cooperación Municipal. Un compromiso del Consell que se venía incumpliendo desde hace casi veinte años. Aprobado por todos los partidos pero que, sin embargo, el PP nunca puso en marcha. O el plan de construcción de colegios que, de alguna manera, nos reconoce la capacidad de ejecutar infraestructuras.

En su caso por ejemplo, usted ha sido muy crítico con el reparto de ayudas de Rafa Climent en la Conselleria de Economía. ¿Los departamentos de Compromís

En principio no...

Pero usted se quejó del reparto de las subvenciones a polígonos industriales en el que se primaba a la comarca del conseller...

No creo que la toma de decisión de los consellers de Compromís esté presidida por el intento de marginar a los municipios socialistas. Lo que pasa es que con una medida muy oportuna, así se lo dije al conseller, como las ayudas a polígonos, en zonas tan potentes en industria como el Vinalopó, había que hacer las cosas muy bien. Y yo me sentí en la obligación de reclamar el mismo trato que se dispensó a l'Alcoià o la Vall d'Albaida, lo que se conoce como comarcas centrales. Desde mi punto de vista, no existía una igualdad en la atención. Pero creo que ahora estamos en disposición de solucionarlo.

¿Entonces la Conselleria de Economía, a diferencia de lo que usted solicita, no atiende a la Industria?

Ahora se le hace más caso. Sin ningún tipo de duda... Yo vengo diciendo que en esta Comunidad, unos tienen sol y otros tenemos polígonos industriales. Y hay que buscar la vía para conjugar esas dos fórmulas. La gestión del Consell tiene que buscar el encuentro de esos motores como modelo económico. Tenemos el reto de coser esos dos intereses.

¿Está cómodo con los pactos de gobierno del PSPV y Compromís?

Sí. La pluralidad aporta una visión más profunda del estado de las cosas. Los pactos con Compromís, tanto el que tengo en mi municipio como en la federación, me están aportando cosas buenas aunque siempre pueda surgir algún pequeño problemilla.

Todo apunta que es la fórmula que tendrán que volver a ensayar para mantener el poder institucional tras las elecciones de 2019...

Es cierto. Se repetirá la pluralidad de la escena política y la fórmula del Consell del Botànic. A partir de 2019, nuevamente, van a surgir alianzas que se van a tener que gestionar. Y esto es muy claro. Nos lo mandan los ciudadanos. Nos piden que nos entendamos. Y eso debe ser sagrado.

Le hablaré de un tema concreto. Usted es alcalde de una ciudad ubicada en zona castellano-parlante. ¿Avala usted la política lingüística que está desplegando la Conselleria de Educación

Me siento más cómodo con la ley que se está tramitando ahora que con el primer decreto. Creo que es mejor solución la rectificación que la primera idea. Es verdad que aquella versión inicial, especialmente en nuestra provincia, generó una contestación que considero lícita y que, incluso, pudo ser hasta lógica.

¿Los niños de esta Comunidad deben estudiar en las escuelas valenciano, castellano e inglés?

(Rotundo) Sí. En el nivel que los técnicos, especialistas en educación y pedagogos digan que pueden asumir los alumnos, yo soy partidario de que se aprendan los tres idiomas.

¿Y los funcionarios que tengan tareas de atención al público deben saber valenciano?

Sí. Es una lengua oficial. Deben atender en valenciano o en castellano según lo que pida la persona. Los ciudadanos deben tener los mismos derechos a la hora de dirigirse a la administración pública, que se mantiene con los impuestos de todos. Tenemos que atenderlos por igual. El funcionario debe saber que trabaja en una Comunidad con dos lenguas oficiales. Y eso es una cosa que está ahí.

¿Qué quiere ser de mayor en política Rubén Alfaro?

No lo se. Esa es la verdad. La política es un aprendizaje diario en el que van surgiendo oportunidades. Por eso, en política, el futuro es muy incierto. De momento, trabajar por Elda y el futuro ya se verá.

¿Y dentro del PSPV? Ha sido usted uno de los grandes perdedores del congreso provincial socialista...

No...

¿Está descolocado?

Tampoco. En esto de los congresos hay momentos. Y unas veces estás mejor y en otras no tanto.

No ha salido usted bien parado de este proceso interno...

No he salido bien parado del congreso provincial. Eso sí es cierto.

¿Por qué no se integró como vicesecretario provincial cuando José Chulvi

Quedó claro siempre que mi papel se iba a centrar en la ejecutiva del PSPV. Y le transmití a Chulvi que no iba a estar en una dirección provincial en la que era el secretario general el que debía tener protagonismo.

¿Y hacia dónde debe caminar, en su opinión, la nueva dirección provincial del PSPV?

Favorecer la participación, cumplir con las resoluciones de los congresos y centrarse en el objetivo electoral de 2019. A mi, además, me gustaría que mi partido presentara un proyecto para Alicante con un nuevo modelo económico, como decía antes, que combine los intereses de los que tienen sol con los que vivimos de la actividad industrial y manteniendo la agricultura. Y en ese reto, desde luego, estoy dispuesto a colaborar.

¿Debe tener perfil propio el socialismo alicantino en el PSPV?

Debe diseñarse un modelo del socialismo alicantino que sea capaz de reivindicar cosas allá donde toque. Hay que sumar los intereses de nuestras siete comarcas para disponer de un proyecto armónico en lo que todo el mundo se sienta representado.

¿Pero debe tener perfil propio?

Sí. Participar, colaborar y, llegado el caso, reivindicar. Esta provincia tiene necesidades para las que nosotros también debemos aportar soluciones. El socialismo alicantino debe tener voz propia en València y en Madrid.

¿Qué le debe a Ángel Franco

Nada absolutamente.

Con esta respuesta se entiende menos su dependencia. ¿Usted no es de Ángel Franco entonces?

Yo no soy de Ángel Franco. Sí le tengo respeto. Pero es que puede que yo sea el socialista de esta provincia más antiguo de Ximo Puig. Esto de los apellidos no lo llevo nada bien. Mi primer apellido, si tengo alguno, es el de Ximo Puig, al que yo apoyé desde el inicio para que fuera presidente de la Generalitat.

¿Por qué propuso entonces como vicesecretario provincial al concejal alicantino Carlos Giménez, imputado y hombre de confianza de Ángel Franco?

Era una decisión que habíamos tomado dentro de un grupo amplio de gente que me había respaldado.

¿Qué papel quiere jugar usted en su partido a pesar de reconocer que no salido bien parado?

Activo. Soy de la ejecutiva del PSPV y estoy disposición de José Chulvi. Y lo sabe. No voy a generar conflicto. Los procesos internos se abren y se cierran. Una vez se terminan, todos somos del secretario general. Y eso hay gente en mi partido que no lo acaba de comprender.

Cerrado ese proceso orgánico. ¿Cuál debe ser el objetivo electoral de los socialistas para 2019?

Intentar mantener las alcaldías y colaborar en mejorar los resultados autonómicos. Tenemos que ser primera fuerza en esta Comunidad.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats