Ya confirmado que José Chulvi, alcalde de Xàbia y portavoz en la Diputación, se ha convertido en el secretario provincial del PSPV con el apoyo del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y de las plataformas «sanchistas», todo indica que una de las batallas que se librará en el congreso que se celebrará el próximo 17 de diciembre será la de intentar buscar una solución a la eterna convulsión interna de la agrupación socialista de Alicante. Y esa operación ya está en marcha. Desde la comarca de l'Alacantí se ha presentado una larga enmienda a la ponencia que se debatirá en ese congreso -casi tres páginas entre la exposición de motivos y la propuesta de resolución- en la que se propone trocear la agrupación socialista de la capital en colectivos más pequeños de distrito, una resolución que, por extensión, acabaría limitando el poder del exsenador Ángel Franco, ahora debilitado tanto en el PSPV como en la nueva dirección provincial pero que sigue moviendo los hilos de la cúpula socialista de la capital.

No se trata de una cuestión sin importancia. Puede convertirse en un asunto capital de ese congreso que se presentaba como descafeínado. La agrupación socialista de Alicante vive envuelta casi de forma permanente en tensiones internas y luchas cainitas desde hace años. Una inestabilidad que se ha acrecentado en los últimos tiempos con la crisis municipal que se vive en el Ayuntamiento de Alicante, donde los seis ediles socialistas se han quedado solos en el gobierno con el alcalde Gabriel Echávarri -procesado en un procedimiento e imputado en otro- pendiente del sentido de las resoluciones judiciales que tendrá que afrontar en las próximas semanas. Formalmente, la enmienda se ampara en las resoluciones que se tomaron en el último congreso federal del PSOE que encumbró a Pedro Sánchez y en la cita que aupó a Ximo Puig en julio al liderazgo del socialismo valenciano que apostaban por la división de las principales agrupaciones en distritos.

En València, como en otras ciudades de España incluso más pequeñas que Alicante, ya es una fórmula que se utiliza desde hace tiempo. Pero Franco y los suyos siempre se han resistido a pesar de que, en ocasiones, han registrado mas militantes que el «cap i casal». La propuesta, según apuntaron algunos de sus promotores, tiene como objetivo remover la agrupación de Alicante en busca de una solución teniendo en cuenta, en cualquier caso, que su situación tiene efecto sobre el conjunto de la provincia. La maniobra contaría con el respaldo del PSPV, de Ferraz y también de la nueva dirección de Chulvi. Pero, en el fondo, el objetivo final es limitar el poder de Ángel Franco. El exsenador quedó arrinconado en la dirección del PSPV que dirige Ximo Puig y ahora corre ese riesgo en la provincial. Y además parece que ahora tampoco tendría margen entre los delegados para rechazar la propuesta en el congreso del próximo día 17. No es lo mismo que controle la agrupación más importante del partido en la Comunidad para ejercer como contrapoder que haya varias agrupaciones en las que se puedan generar nuevos liderazgos con capacidad de darle réplica.

La hoja de ruta de la enmienda -apoyada por numerosas agrupaciones, parte de los afines a Puig y las plataformas «sanchistas»- pasa por instar a la dirección del PSPV y a la cúpula federal para que inicien ese proceso. Posteriormente, se tendría que reunir la asamblea del partido en Alicante para certificar su conversión en varios colectivos -las previsiones apuntan a cuatro o cinco-, un proceso que supervisaría una comisión. Finalmente, se crearían dos ejecutivas de ámbito supramunicipal que actuarían en paralelo: una para coordinar las agrupaciones de distrito de la capital y otra para la comarca de l'Alacantí.